Sol y Luna en Haría

Hola. Restaurante bien ubicado. Comida decente, pero dados los precios, cabría esperar algo mejor.

Cenamos aquí esta tarde después de la playa. Todo estuvo maravilloso, típicamente canario. Nos atendió una camarera encantadora y muy amable: atenta, paciente y cálida; casi como si estuviéramos comiendo en casa. Éramos cuatro adultos y dos niños (de 11 y 13 años), e intercambiamos casi todo. A todos les encantó, incluidos los niños. Todo estaba fresco; había helado y mousse de chocolate de postre, y un espresso buenísimo. Todo llegó siempre rápido y eficientemente. La paella, por supuesto, tardó un poco más, pero nos lo avisaron con antelación y no fue ningún problema; de hecho, estaba muy fresca. Muchas gracias, ¡hasta la próxima!

Muy bueno todo, se come muy bien, buen servicio, muy amables todos. los calamares buenísimo. volvería sin ninguna duda.

Comida espectacular y tradicional, muy recomendable el pulpo enmojado, personal encantador. Si regresamos a Punta Mujeres volveremos directas a comer aquí.

Comida espectacular, vistas espectaculares y el servicio súper majo. De entrantes las papas negras con gambas y el pulpo mojado buenísimos. Y el pescado y calamar grill también. Si volvemos a Punta Mujeres no dudaremos en volver.

Hemos dado por casualidad y un acierto. Las gambas al ajillo, el queso gratinado, ensalada, sardinas… maravillosa la comida y la calidad. Las vistas frente al mar y trato excepcional. Un auténtico placer en un rinconcito típico isleño.

El mejor calamar que me he comido en mi vida. Buen servicio. Lo recomiendo 100%

Un lugar encantador, muy tranquilo cuando estuvimos allí, pero eso no impidió que esperáramos más de una hora, jaja... El chico que nos atendió prácticamente se olvidó de nuestra existencia y les dio la comida a otros clientes que no la pidieron, pero aun así la comieron. Para compensar, nos dio panecillos "gratis" y luego nos los cobró; supongo que se le había olvidado que nos los había dado como disculpa. A la hora de pagar, esto lo confundió aún más; tuvimos que decirle tres veces lo que habíamos pedido. La comida estaba buenísima. Pedimos paella de pescado para dos, que estaba realmente increíble, muy fresca y con la cantidad perfecta. ¿Volvería? Sí, buena comida, y al final mi pareja y yo nos reímos mucho de la situación.

Sin más. no volvería y probaría en otro sitio. El camarero de la barra un poco borde pero el que nos atendió en la mesa atento y muy educado, algo más mayor. Pedimos recomendación y nos atendió muy bien pero nos metió un pescado de 40€, más seco que seco, y pensábamos que era el de 20€ (pescado del día 20€; parrillada de pescado 20€/persona) Pedimos 2 raciones más y pagamos 100€ por comer. Caro!

El Restaurante Sol y Luna, ubicado en la isla de Lanzarote, en Punta Mujeres, ofrece una experiencia culinaria con un ambiente atractivo y vistas al mar, el lugar se presenta como una opción interesante para disfrutar de la gastronomía local. Evoca al Restaurante de Enzo de Punta Secca (Ragusa) en la serie El comisario Montalbano por su autenticidad. Acudimos el viernes 07/02/25 a las 19 horas para degustar en la terraza un arroz con bogavante para dos, regado con un vino de la tierra, Yaiza Blanco Seco, y tras ello, tomamos un café expresso junto con una copa de un aguardiente de hierbas Rúa Vieja. El arroz con bogavante para dos estaba en su punto, siendo ración generosa para dos comensales. El vino, frío, no decepciona y marida muy bien. Se nota la mano que ese vno es la expresión genuina de la viticultura artesanal de Lanzarote, y en concreto de la bodega Vega de Yuco. El café cargado, como debe ser un expresso y el aguardiente, frío, deliciosamente dulce y servido en una copa previamente congelada. La atención de Luis Díez, el encargado y camarero, sensacional, notándose los muchos años de oficio. En resumen, el restaurante puede ser una opción para quienes buscan un lugar con encanto, y sencillo, alejado de tumultos y colas, siendo muy recomendable si se busca comida casera de calidad y a un precio medio contenido, teniendo en cuenta que hoy, comer o cenar fuera no es barato.