SERENDIPIA. (Zaragoza) en Zaragoza

Inexcusable la visita a este local si te gusta la buena comida. Trabajan con muy buena presentacion, platos perfectamente cocinados sin ambages y con respeto. Mención especial tienen los postres, todos caseros, elaborados 100% en la casa con mi buena mano. Su menú degustación es un regalo para el trabajo y la variedad que tiene. Además ahora tienen terraza.

Pequeño en dimensiones, grande en experiencia. Serendipia es ese tipo de lugar que uno descubre por casualidad y luego recomienda con entusiasmo. Su propuesta gastronómica sorprende por su equilibrio entre creatividad y respeto al producto, y su menú se convierte en un viaje de sabores bien orquestado. Cada plato, desde los entrantes hasta el postre, llega a la mesa con una presentación cuidada y una gran combinación de sabores.El pulpo, especialmente, merece ovación: tierno, sabroso, con una base que lo acompaña que está riquísima. El local, aunque de tamaño reducido, es cálido y acogedor. Ideal para disfrutar sin prisas… y es aquí donde encontramos el único “pero”: el ritmo del servicio es pausado, quizás demasiado para quienes no tienen espíritu zen. Pero si vas sin mirar el reloj, te lo perdonas rápido. El trato, eso sí, es impecable. Personal atento, amable y con ese toque cercano que hace sentirte como en casa. Conclusión: Serendipia es un hallazgo que hay que celebrar. Si no tienes prisa y quieres comer muy bien en un ambiente que invita a disfrutar.

Lugar acogedor, servicio exquisito y comida suculenta con una presentación muy detallista. Imprescindible visitarlo... seguro que se repite 👌

Restaurante pequeño pero muy acogedor. Todos los platos con una elaboración muy cuidada y con terminaciones muy detallistas. Precios muy asequibles y servicio muy amable, no se puede pedir más. Salimos muy contentos de la experiencia. Muchas gracias por todo

Excelente comida, muy amables y un buen servicio.

Comida deliciosa en un espacio muy agradable y con un servicio impecable.

Admirable. Muchas gracias por la experiencia.

La comida está buenísima y el servicio muy amable.

Una experiencia gastronómica ineludible. La elaboración, el tiempo en servicio, el nivel de detalle, la intimidad. Genera una de las mejores experiencias que puedes disfrutar en Zaragoza.

Cogimos el menú de degustación, todo buenísimo y para repetir sin ninguna duda 100 × 100 aconsejable. Buen servicio. 👌.