Santa Anna Restaurant en Torroella de Montgrí

La estancia ha sido maravillosa. Trato muy amable y servicio empecable. La habitación y el baño muy amplio. Lo recomiendo 100%.

Hotel muy céntrico con un gran servicio y limpieza gran atención en todo momento y un buen desayuno y opción de cenar volveremos seguro

Hotel muy bien situado con parking privado de pago. Cálida bienvenida Personal muy amable y profesional. Habitación grande y muy limpia, televisión con muchos canales franceses. Desayuno muy agradable en terraza con vistas al mar. Restaurante de muy buena calidad con un servicio impecable. Un hotel para recomendar +++ muy buena experiencia.

Anfitrión de restaurante perfecto en una excelente ubicación.

En la cima, muy bien ubicado, magnífica habitación y excelente restaurante, gracias por todo. ¡¡¡Recomiendo con los ojos cerrados!!! gracias gloria

¡Excepcional! ¡Gracias por la calidad de la acogida, las habitaciones, las comidas, todo! Esta no es la primera vez que venimos y nunca nos decepcionamos. Gracias de nuevo y hasta pronto

Hermoso hotel. Fuimos muy bien recibidos. Habitación espaciosa. Desayuno con amplia variedad en el 4º piso en una terraza con vistas a parte del Estartit y al mar. Restaurante de calidad y servicio muy agradable. Aparcamiento un poco caro (15€/noche) También un extra de 15€/noche para un niño menor de 2 años (a través de Wonderbox), mientras que desde la reserva online un niño de 0 a 2 años no debe añadirse al formulario de reserva. Wonderbox = tarifas ocultas

Amable bienvenida por parte del propietario, habitación limpia, buena ropa de cama, cena decente, vino muy caro por copa. Desayuno: los huevos fritos y el tocino estaban fríos. Mucho ruido por la noche.

Accueilli chaleureusement par une jeune fille pour une réservation, le soir même pour un couple avec un petit chien, le repas excellent avec un menu à 26 € servi copieusement avec gentillesse et de bons conseils americano en apéro très bien préparé, puis menu avec une zarzuela Excellente. Nous reviendrons avec plaisir et nous pouvons que recommander cet établissement.

C’est un sans faute pour ce restaurant, et c’est assez rare pour le souligner. L’accueil est chaleureux et le personnel parle français Le cadre est très agréable, entre modernité et vieilles pierres, de vraies nappes repassées et des serviettes en tissu. Quant au principal, la nourriture, c’est tout simplement excellent, que ce soit les entrées, les plats ou les desserts. On s’est vraiment régalés, avec une mention spéciale pour le tartare de thon. Les produits sont frais et très bons. Le service est exceptionnel, par exemple le serveur vous apporte la dorade puis vous propose de la préparer (lever les filets, ôter les arêtes) La carte des vins est très bien fournie et abordable. Le rapport qualité prix est vraiment imbattable. Avec un menu à 26€50 entrée plat dessert le soir, avec cette qualité et ce service il est difficile de trouver mieux (où que ce soit d’ailleurs). Nous y sommes allés deux fois en deux jours et nous y retournerons avec grand plaisir.