San Sebastian 57 en Santa Cruz de Tenerife

Un ambiente tranquilo y un servicio maravilloso y cercano por parte del personal. Dejarse llevar por las recomendaciones es una apuesta segura

Decepcionante el servicio para tener la categoría que tiene. La comida no está mal.

Muy buena comida cuidando hasta el más mínimo detalle. Éramos cuatro e hicimos nuestro propio menú degustación ordenando la mayoría de sus entrantes, 3 platos principales para compartir y algunos postres. ¡Todo lo que probamos estuvo delicioso! El único plato que probablemente no fue supremo fue el brownie, demasiado simple para el restaurante. ¡Me encantaron los pequeños dulces y golosinas que sirvieron al final! Altamente recomendado 👌

¡Muy buena comida! Muy buen restaurante! Hemos estado en el San Sebastián 57 sin planearlo antes y disfrutamos mucho de este momento y no nos arrepentimos de esta elección. Pero… La camarera no hablaba ningún otro idioma que no fuera español (somos francés e inglés) lo que realmente no ayudó a los intercambios sobre la comida, los vinos, etc. El menú, en español, se propuso a través de un código QR con acceso limitado a internet, por lo que era complicado conseguirlo en otro idioma. Una pena en este tipo de restaurante… que en todo caso recomendamos.

Teniamos altas expectativas en este restaurante y la verdad es que nos decepcionó. El producto que tienen es de muy alta calidad, pero no nos encantaron la mayoria de platos que probamos y los precios que pagas son altísimos. Nos dolió especialmente pagar 4€ por una botella de agua del grifo filtrada. El servicio muy amable.

¡USTED LECTOR!, le recomiendo REVISAR ATENTAMENTE esta CRÍTICA antes de PLANIFICAR su visita a este establecimiento. (Cabe aclarar que esta reseña es desde el punto de vista de restaurantes de alto standing) Al ingresar al restaurante, se encontrará con un comedor de dimensiones reducidas, caracterizado por una decoración sencilla y minimalista. La cocina, visible para el público, evoca una impresión poética. El servicio, aunque funcional, carece de calidez, siendo apreciable la ausencia de un trato más ameno. No obstante, es relevante destacar que el chef ofreció al final de la cena una charla que se distinguió por su amabilidad, carisma y profesionalismo. En cuanto a los camareros, sería beneficioso que proporcionaran descripciones detalladas de los platos. Mi acompañante, quien es alérgico a los mariscos; en este caso, se adaptaron los platillos de manera adecuada. Opté por el menú degustación, con un costo de aproximadamente 50€, y puedo afirmar que no deja lugar a la insatisfacción en cuanto a porciones. El menú ofrece una variedad considerable de platos que sacian el apetito de una persona promedio. Además, la selección de vinos es extensa. A pesar de no ser un entusiasta de los pescados, la preparación y combinación de sabores resultaron altamente satisfactorias. Destaco la ostra en escabeche de zanahoria como el plato más destacado, con una explosión de sabores sublime y un toque picante perfectamente equilibrado. En contraste, el cordero se posiciona como el punto menos favorable del menú, presentando sabores intensos que perturban la armonía general. Los demás platos exhiben una calidad destacada y un sabor apreciable. En resumen, esta experiencia gastronómica ofrece tanto momentos culinarios excepcionales como algunos aspectos mejorables en el servicio y la coherencia de los sabores. Su elección dependerá de la importancia que otorgue a estos elementos en su búsqueda de una experiencia culinaria gratificante.

Sitio de lujo para disfrutar de gastronomía y vinos.

Pedimos la comida para llevar en Nochebuena. Alta calidad, con un buen producto en general de todos los platos

10/10! Servicio amable y atento, comida deliciosa resultado de un producto bien tratado y ambiente tranquilo y elegante. Sin duda volveremos.

Platos abundantes!!, Hubiera preferido que me aconsejaran pedir una ración para compartir entre dos y poder disfrutar de algún otro plato.