San Agustín Gourmet en Granada

La primera noche quedamos encantados con las tapas. Unos días después ya no era así. El pan estaba quemado en el borde y las verduras de la sartén también estaban negras en el borde. La segunda vez estuvimos allí por la tarde. Pero todo lo que no se quemó sabía muy bien.

Servicio y comida excelentes, tapas estilo fusión MUY RICAS!!!

La verdad que no está mal, tiene unas cuantas opciones vegetarianas y la comida está bastante rica, a mí parecer es un pelín caro pero dan un servicio acorde, está ubicado en buen sitio y en ciertas horas tienes tú solecito, se está bastante agusto✨ Una parada si estás por Gran Vía para echarte una cerve

Comida, ambiente, local, emplazamiento... todo genialisimo, lo recomiendo mucho, quizás no para tapear pero sí para comer, tienen un gusto en la decoración muy chulo

La comida muy rica, sobretodo las croquetas. Los camareros muy amables y muy cercanos.

¡Me encantó el hermoso ambiente de este lugar, el servicio amable y las sabrosas tapas! Buena música también, Aretha Franklin, Joss Stone, etc. podría haber sido mi lista de reproducción personal. Definitivamente recomendaría este lugar a cualquiera que busque una bebida agradable y una comida saludable en un ambiente relajado.

Pedí un sándwich de pimientos verdes y jamón y aguacate. ¡Conseguí tapas de cortesía (puré de papas) con cerveza! Los amo a todos y están en una gran porción, así que no puedo terminarlo, los dueños son muy amables. :3

Espectaculares las croquetas, el salteado de verduras y la torta de secreto. Cuando vuelva a Granada repito sin duda.

Una comida deliciosa y un trato al cliente maravilloso, estaba todo buenísimo, desde lo más simple hasta lo más elaborado, riquísimo. El personal muy cercano y amable, lo recomiendo, además la relación calidad precio es increíble.

¡Deberías venir aquí ahora mismo! Disfruté de una velada memorable aquí con mi hijo en nuestra última noche en Granada. Llegamos justo cuando abrieron a las 8 precedidas. Por un grupo de nueve personas. Es un restaurante pequeño y el personal trabajó de manera cooperativa. Para acomodar al grupo y hacerlos sentir cómodos, todos nos instalamos fácilmente. Nos dieron una tapa increíblemente deliciosa hecha con un lomo de cerdo salteado con dos salsas diferentes, que podría haber hecho una comida sola. Al final optamos por unos padrones de pimientos que eran más grandes como los que hacía mi madrina, perfectamente ampollados con una preciosa sal crujiente. El mío acompañado de cerveza helada, el mío con manzanilla fría. Pasamos a un plato de croquetas de champiñones con un sabor muy delicado... perfectamente cocinadas... Un exterior tan crujiente y un interior tan tierno y humeante... ¡EL CIELO! Luego compartimos un plato delicioso de alcachofas con trufa y simplemente... ¡DELICIOSIDAD! por supuesto, se añadió cerveza y vino. Fue un gran placer ver a Olivier, el talentoso chef, y su asistente, cuyo nombre me avergüenza decir, no recuerdo, trabajar tan fluidamente y cooperativamente en una cocina increíblemente pequeña, produciendo comida increíblemente deliciosa sin conflictos ni dificultades. Al frente de casa Juanjo, sociable, comprometido pero permitiendo a sus invitados todo el tiempo del mundo. Gracias a todos por regalarnos este maravilloso recuerdo en el que todos nuestros sentidos y emociones quedaron tocados.