Sal y Pimienta en Tías

Comida deliciosa y una vista preciosa. Es una pena que el servicio fuera tan deficiente y que las bebidas y postres fueran servidos muy esporádicamente.

Muy a mí pesar, no puedo ponerle más puntuación, ya que no llego a cumplir las expectativas que pensabamos. En torno a las 1o.2o de la noche, creemos que el jefe, nos dice que podemos sentarnos tranquilamente a cenar, que la cocina cierra a las 11.00 pero pero no tenemos prisa para disfrutar de la cena. En el momento de sentarnos el personal comienza a recoger todo a nuestro alrededor, haciendo de la experiencia una situación muy incómoda, ya que solo sentimos querian marcharse. Entendemos que todo trabajador tiene un horario pero entonces no inviten a sentarse a cenar es su restaurante en esas circunstancias . Pedimos pimientos de padrón, no eran de padrón, como gallega que soy, revisen por favor el proveedor que les atiende las necesidades....papas arrugadas, calentadas al microondas y muy duras e insípidas. Es una pena que sea algo típico, le dediquen tan poco cariño. También pedimos una ensalada de jabugo con aguacate y tomate, que valió la pena y unas puntillas de calamar que no me atrevería a decir que eran frescos.... Solo puedo reseñar, la actitud de la camarera que nos atiende, si no me equivoco, una chica canaria muy simpática que aguantó hasta el momento que terminamos de cenar, solo nos dieron media hora y amablemente nos invitó a marcharnos pero con mucha educación, reflejando que esas efectivamente, no eran las maneras pero haciendonos entender de debían de cerrar. En definitiva no pudimos tomar ni café, ni nos ofrecieron postre alguno, cuando su jefe nos aseguro que no tendríamos porqué tener prisa en cenar. Por favor, no hagan que los comensales nos sentemos para no poder disfrutar después de una bonita cena. No volveremos simplemente por la sensación de ansiedad que nos dejaron ver. No sienten a las personas solo por facturar. Está reseñas es con la idea de mejorar en este aspecto. Gracias.

El camarero Jesús fue muy amable cuando nos atendió la comida muy buena y las papas arrugadas espectaculares

Pedimos dos paellas veganas dos noches seguidas y siempre han estado increíbles. Salen bien calientes y llenas de sabor. El personal es muy amable y atento. Gracias a todo el personal.

Fui con 3 amigas y sin duda nuestro mejor momento en Lanzarote. JESUS ES EL MEJOR. Nos sacó una sonrisa e hizo que nos lo pasaramos genial. Volveremos al restaurante por Jesus. Gracias y gracias!!!

Cocina local habitual. Paella mediocre. Sopa de pescado casi sin nada, super liquida...buen ambiente y servicio

Restaurante encantador con vistas. Mesas en el interior y al aire libre. El personal fue amable, profesional y servicial, e hizo que nuestra experiencia fuera agradable. Toda la comida estaba deliciosa y nos encantó. Comimos: pan de ajo (sin duda lo recomiendo), paella vegetariana, salmón con patatas canarias, pollo stroganoff y brownie. El brownie fue mi favorito, muy ligero y delicioso. Ambiente relajado. Gracias por una velada tan agradable.

Pedimos entrantes, platos principales y dos platos para los niños. Al rato, decidí preguntar dónde estaban los platos principales. El camarero parecía no saber que habíamos pedido. Así que dos adultos pueden vivir con solo dos entrantes... ¡Qué historia tan rara! No había otras mesas ocupadas. Uno de los niños quería una segunda ronda de nuggets de pollo, que de repente venían de otro paquete. La vista está bien, pero no pienso volver. Escuchar es la primera tarea de un camarero, si me preguntas.

Una vez más este año, la comida estuvo deliciosa, un servicio amable y una hermosa vista.

Comimos el plato de tapas, que estaba bastante bien. Las patatas están muy ricas pero todo lo demás es normal. Aquí preguntamos si podían pedir el plato sin pescado o reemplazarlo porque no comemos pescado; lamentablemente eso no fue posible. El daiquiri estaba muy rico, pero los refrescos eran demasiado caros en mi opinión. Pagamos más de 60 € por el plato (para 3 personas) y 4 bebidas.