Rick´s Cafe en Gijón

Un sitio donde poder disfrutar de una terraza con vistas al mar y a la playa San Lorenzo,café, cerveza 🍺 bolsa de patatas ,sin más.

Había un chico aprendiendo muy amable

Sitio peculiar con una gran terraza, el café con leche y con hielo es muy original. Tienes q pedir tu mismo en barra.

Café con hielo muy bien preparado con buenas vistas. Terraza un poco sucia, eso si.

Un sitio increíble con vistas infinitas a la bahía de Gijón, con un servicio aceptable, y donde se puede acudir con tu mascota din ninguna restricción. Para nosotros es un fijo los fines de semana. Muy recomendable.

Sitio perfecto para tomar algo y relajarse un rato,buenas vistas.

Rick’s Cafe, Bar Av. de José García Bernardo, 540, Periurbano - Rural, 33203 Gijón, Asturias. En frente de la playa los Mayanes. G9V4+MP Gijón Horarios.: Todos los días de 12.00h - 24.00h TF.: 985 36 86 16 Pagos Con móvil por NFC Tarjetas de crédito Tarjetas de débito Opciones de servicio: Tiene terraza · Sirve buenos cócteles · No se aceptan reservas .- El café con leche y hielo y los batidos están espectaculares. .- No es un sitio para comer. Aunque por la mañana tienen pinchos. .- No tiene pagina Web .- Se permiten perros .- Aparcamiento gratuito, aunque casi siempre lleno. .- Es una de las mejores terrazas de Gijón Enfrente del mar y de la playa de los Mayanes. .- Buen ambiente, de todas las edades .- Tiene dos amplias terrazas, no sirven en la mesa, tenéis que ir a la barra, normalmente sobre todo por el verano y con buen tiempo con cola. Aunque con un servicio de camareros ágil. .- La parte de dentro también es bastante grande y ventilada. En Asturias llueve y es un buen refugio. .- Si no te gusta el olor aporro no vayas. .- Los precios no están mal, para el sitio donde está .- Acceso para sillas de ruedas .- Sitio muy recomendable.

Se nota que falta Rubo, era la esencia, por lo demás, sigue siendo mi sitio favorito de Gijón. Ambiente variado, libre y respetuoso. Cafés muy ricos cómo en casa y los pinchos de la mañana no están nada mal. No es un sitio para comer, pero si para todo lo demás.

Un clásico de gijon para tomar algo en frente de la playa, el ambiente tranquilo con terraza y el servicio genial (la camarera muy simpática)

Desde hace un tiempo esta un poco descuidado. Los camareros que hacían tan rico el café van cambiando por chavalinos que pasan un poco de servir con cierta calidad y mantener un poco las mesas decentes. Una pena.