Restaurante San Paio en Santiago de Compostela

Buen servicio y comida pero después de gastarme 180€ me cobran el envase para guardar la comida que me sobre yo creo que eso sobraba.

Un sitio muy tranquilo, se come muy bien. El personal muy amable, no hay una hora de comida tope, llegamos a las 15;00h nos atendieron enseguida. El caldo era especialmente sabroso. Y el lomo también nos ha encantado un sabor increíble! Lo recomiendo. El menú son 15€ con bebidas y postre había flan casero! 😋

Espectacular comida y trato. Todo buenísimo. Deseando volver a Lavacolla para poder repetir.

Me gustó mucho un sitio tranquilo para descansar y la gente maravillosa sobre todo la señora que nos atendio nada más llegar maravilla volveremos

¡La comida está riquísima! Me sorprendió. ¡Vale la pena comer en este restaurante!

Los camareros muy atentos y eficientes. Pedimos poco, solo pulpo (rico) y vieiras (deliciosas). Buena experiencia. Repetiría. Han cambiado de dueño varias veces por lo que recomiendo hacer caso a las últimas reseñas ya que las muy antiguas no hacen honor a la realidad de hoy en dia

Nos atendieron muy bien, lo recomiendo si quieres desayunar, antes de emprender la última etapa de peregrinaje hacia santiago.

¡Un lugar familiar y acogedor, el mejor! Este lugar es increíble. El personal es el mejor. ¿La comida? ¡Dios mío! ¿La ensalada? ¡Es más que perfecta!

Nos alojamos en el Albergue A Fábrica, que es maravilloso, para nuestra última noche del Camino antes de Santiago y lo visitamos tres veces. En las tres ocasiones, Kevin nos atendió y fue excelente. Llegamos al pueblo antes de que abriera el albergue, así que paramos a tomar una cerveza. A pesar de estar, obviamente, en el camino de 25 kilómetros, Kevin nos recibió cálidamente y nos trajo las bebidas rápidamente. Volví para picar algo y, de nuevo, el servicio fue excelente. Finalmente, volvimos para cenar como es debido y nos encontramos con Kevin. Tuvo paciencia mientras pedíamos cosas distintas del menú y no de la forma más ordenada. Las vieiras estaban buenísimas. La ensalada de aguacate y burrata era enorme y deliciosa. Los platos principales, el lomo de cerdo con champiñones y el secreto de cerdo con rúcula crujiente, también estaban buenísimos. Terminamos con tarta de Santiago casera y budín de pan con chocolate. Luego pedí un café con leche, ya que aún estábamos tomando, y Kevin me lo sirvió sin impaciencia. También tenían una buena selección de vinos y disfrutamos de una buena botella de godello. La terraza es sencilla, pero siempre había un rincón con sombra, protegido del viento toda la tarde y la noche. El interior tenía buena pinta, pero siempre comíamos dentro.

Nosotros, como grupo de peregrinos del albergue vecino, recibimos una bienvenida muy cálida y amable. Tuvimos una comida realmente deliciosa. Algunos teníamos el menú establecido y otros los platos principales del menú a la carta, y todo estaba delicioso y muy bien servido. El camarero también hablaba buen Inglés, lo que facilitaba mucho el pedido. Recomiendo encarecidamente este restaurante e IT es uno de los mejores del Camino, y para todos los demás también. Cuando pagamos, incluso pedimos más bebidas, y como estaban a punto de cerrar, nos ofrecieron la oportunidad de tomar nuestras copas y dejarlas fuera del restaurante hasta la mañana siguiente. Una noche perfecta para todo, gracias a este restaurante.