Restaurante Parador de La Palma en Breña Baja

Paradores siempre tiene un servicio 15/10. El personal siempre te atiende como si estuvieras en un Ritz. Nos quedamos mi pareja y yo para acudir a la boda de una amiga. Está claro que la ubicación es para hacerse uno un retiro espiritual, leer, escribir, relajarte y no si pretendes explorar la capital y los alrededores… está alejado y el acceso es difícil. TIENES QUE TENER COCHE. Los desayunos diez, y la atención del equipo perfecta, pero cuesta 20 euros por persona y día ( 16 con la oferta). Aún así mucho dinero en relación a lo que se ofrece. El agua de las habitaciones se paga aparte. Las habitaciones necesitan una reforma y mejor aislamiento entre habitaciones ya que se escucha al vecino todo lo que hace. Recomendamos si buscas paz espiritual. Si no, no.

Fuimos a cenar, todo delicioso. El servicio excelente. Muy recomendable

Lugar tranquilo. Comida mejorable. Ideal para parejas y descansar. Horario de piscina muy limitado.

Sin duda alguna, el Parador de La Palma, es uno de los mejores hoteles que hemos visitado. Cuando llegas a recepción, las sonrisas que encuentras te hacen sentir como en casa. Nazareth, Luis y Diego siempre atentos y con ganas de ayudar. Muchos de los eventos que ocurrían en La Palma con motivo de La Bajada de La Virgen de Las Nieves, los descubrimos gracias a ellos. Sneha, Directora de este Parador, nos dio una calurosa bienvenida. Siempre atenta y compartiendo charlas amables. La comida en El Parador de La Palmas es excepcional. Christopher nos cuido y nos recomendó muchos platos y vinos de la isla durante nuestra estancia en el hotel. Siempre agradable y atento. Jorge nos alegro el desayuno en nuestro ultimo día en el Parador. No es fácil tener una actitud positiva cuando se trabaja de cara al público, pero todos en el Parador de La Palma estaban dispuestos a que nuestro paso por el hotel fuera mágico. Gracias a todos por un servicio excelente. ¡¡¡Nos vemos pronto!!!

Una experiencia que volvería a repetir, el parador es muy bonito y la estancia es muy relajada

Ya no es lo que era... Y encima ahora con precios más altos...

El servicio es bueno, hasta donde puede llegar el escaso personal en Julio. Se nota que los camareros están desbordados. Mal dimensionamiento por parte de la gerencia. Luego nos quejaremos de que nadie quiera trabajar en el sector servicios.

Este es el tercer parador que visitamos, pero lamentablemente está al final de la lista. Habitación (5/5): Teníamos una habitación superior con vistas al mar. Era un poco anticuada, sobre todo el baño. Pero estaba bien. Ubicación (3/5): Solo se podía acceder en coche y estaba un poco en medio de la nada. Bar (1/5): Solo abría hasta las 22:30 y llegamos dos veces demasiado tarde. Es muy difícil llegar al bar después de cenar (comíamos en otro sitio). Restaurante: No lo usamos. Desayuno (4/5): Estaba bien, pero lamentablemente no había cruasanes ni pan recién hechos y el café sabía a agua caliente. Piscina (0/5): A finales de junio, la piscina solo abría de 12:00 a 16:00. Es un tiempo extremadamente corto, a pesar de que hacía bastante calor fuera. Tuvimos dos días con actividades y, por lo tanto, no pudimos usar la piscina. Aunque reservamos en parte por la piscina. Servicio (3/5): El servicio fue un poco irregular. No nos avisaron de la gran fiesta en la isla, no resolvieron ningún problema ni nos preguntaron cómo había ido nuestra estancia. Jardín (3/5): El jardín tiene mucho potencial, pero necesita algo de mantenimiento y cariño. Renovación (5/5): No hubo ruido durante la renovación; era muy tranquilo.

Hotel una buena ubicación y tranquilo Han realizado una pequeña reforma, pintar , lacar mueble, reformaron baño pero las mismas piezas y mantuvieron estilo habitaciones El desayuno y comida excelente Una recomendación es que las luces pasillos y patio central por la noche a partir de cierta hora fueron tenues o se apagarán y se activarán por sensor movimiento, ya que si estamos en una isla starlight y este parador una ubicación perfecta se podría disfrutar este cielo nocturno magnífico sin la contaminación lumínica propio hotel

Cogimos una habitación que daba a la piscina. Todo muy bien, lo recomendamos. El almuerzo riquísimo también. Nos invitaron a una croqueta de chipirones y a mechada