Encontramos este sitio gracias a google maps. Gracias a las reseñas y fotos, decidimos ir sábado a la hora de comer. Muy fácil de aparcar y nada más llegar el resto del personal increíble, hemos pedido mesa fuera y nos han dicho que si hacía mucho frío fuera nos podríamos mover. El menú del día buenísimos, de entrantes teníamos opciones de fideuá y paella. La comida buenisima, botella de vino, postre y cafés. La fideuá y paella genial. No puedo mencionar cuando agradable y servicial fue el trato. Volveremos seguro!