Restaurante Los Rosales en Benicarló

Hace años que acudimos a tomar algo ya que tiene una terraza con vistas al mar, alguna vez hemos comido de menú tiempo atrás y había buena relación calidad-precio, pero ahora la verdad que ha cambiado. Comimos de menú y la comida no era nada del otro mundo, lasaña salada y bañada en aceite, un bacalao con pisto en el que el bacalao llevaba una capa de rebozado que estaba tiesa acompañado con un kilo más de aceite, lo mejor de la comida fueron los postres. La decoración del local está bien y la situación estupenda pero la calidad de la comida ha bajado notablemente y los precios han subido. Una pena….

Bar con vistas al mar espectaculares, tiene dos pantallas de futbol enormes y con gran calidad, son muy simpáticos

Este bar/restaurante parece muy poco atractivo desde la fachada, con su aspecto rústico. Sin embargo, si entra, camine por la zona del bar y gire la esquina y encontrará la mejor vista desde cualquier restaurante dentro de una milla o más, si no más. Hay una terraza en la parte trasera con sombrilla para los días muy soleados. También puedes comer allí. Nos encantan unos chipirones rápidos y patatas bravas para compartir. Por dentro hay un restaurante limpio y ordenado. El personal que lo dirige y el bar son muy trabajadores. Los bebedores no pueden sentarse en el espacio del restaurante a menos que estén comiendo. Creo que a algunos les puede molestar porque las mejores vistas al mar, justo al lado, y a la playa junto al Castillo de Peñíscola son desde el restaurante. Hay un menú del día de 13 a 16 horas a 15 euros. Son ofertas muy tradicionales y de buena relación calidad-precio. 2 platos con postre, bebida (botella de vino entre dos) y pan incluido. El menú a la carta está en inglés, si lo deseas, pero el menú de día solo está en español y recomendaría usar la aplicación de traducción de Google para resolverlo ya que el personal no habla inglés. Si lo miras desde afuera, pasarías de largo, pero no lo hagas. Es una joya que merece una visita… ¡o visitas!

La pista de este establecimiento puede presumir con razón de las vistas más hermosas. ¡Es maravilloso!

En realidad es un buen restaurante, pero lamentablemente el servicio está dormido porque esperas horas por un menú o ni siquiera lo consigues. Hoy estuve allí con mi madre, aparte de bebidas no había nada para comer, al menos para nosotros. ¡¡Qué vergüenza!!