Restaurante Las Chimeneas en Nevada

Chulísimo el sitio, y la atención inmejorable. No vi televisión en la casa, que en otros sitios sí que vi que tenían hasta netflix y tal, pero muy bien el resto. A destacar que había cama pequeña extra, y muchas cosas en baño

Este lugar es asombroso. David, el propietario, es un maravilloso caballero británico con gran hospitalidad. El pueblo blanco tiene un ambiente relajado y parece que el tiempo se detuvo aquí hace 80 años, ¡y eso es maravilloso! El interior está preciosamente renovado y la comida es sencillamente fantástica. Gracias David por invitarnos.

Acabo de llegar a casa después de mi cuarta visita a este maravilloso lugar. A dos mil pies sobre el nivel del mar, en la línea de manantial de las montañas de la Alpujarra, se encuentra el pequeño pueblo de Mairena. Hace veinticinco años o más, David y Emma Illsley se enamoraron de la zona, compraron una propiedad, abrieron un restaurante y comenzaron a ofrecer vacaciones. Es un lugar de paz y tranquilidad con comida fabulosa y la oportunidad de hacer amigos entre compañeros de viaje con ideas similares. En esta ocasión éramos veinte (8 parejas y cuatro solteros, todos desconocidos al principio y amigos al final) disfrutando de la Fiesta Week. No puedo recomendarlo lo suficiente. Mi grupo de tres se alojó en una fabulosa casa de tres dormitorios con la vista más maravillosa hasta el Mediterráneo, a muchos kilómetros de distancia. Se incluyen tres comidas al día y la comida, especialmente por la noche, es maravillosa.

Tuvimos el placer de alojarnos en Las Chimeneas durante la semana 'Walk with Chris Stewart (autor de Driving over Lemons). Qué tiempo tan maravilloso lo pasamos, Chris fue un placer, conocer a su esposa Anna también fue un placer. Los anfitriones Emma y David y su personal no podrían haber sido más amables. Emma y David tenían mucho trabajo por delante con dos caminantes muy inexpertos, pero no nos hicieron sentir como si fuéramos una molestia. Anfitriones perfectos y una ubicación increíble. Gracias por una estancia realmente encantadora. Altamente recomendado. patricia y jane

Mientras caminábamos por el GR7, mis amigos y yo paramos a almorzar en Las Chimeneas. Lo que hizo que la ocasión fuera tan especial fue la cálida bienvenida que recibimos, la deliciosa comida (particularmente el gazpacho con remolacha) y el hermoso diseño interior/exterior. Y pudimos darnos un baño en la piscina profunda. Muchas gracias Las Chimeneas!