Restaurante La Vijanera en Ribamontán al Mar

El hotel por fuera es muy bonito,las habitaciones no estan mal aunque se oyen muchos ruidos externos. Sin embargo las comidas dejan muchisimo que desear,apenas te dan comida y si tu llegas antes comes y si llegas el ultimo no comes apenas,no queda ya comida.Horrible.

Fuimos a langre y de pasada lo vimos comimos unas rabas están muy bien y tenían un menú de 14,50 los findes de semana pisto ensalada nada muy sofisticado pero muy bien presentado con personal competente

Cocina muy buena. Servicio de restauración escaso y no muy profesional.

Una experiencia bastante buena. La calidad del producto se nota que es buena, los platos están ricos y bien cocinados. Hemos ido tanto para cenar como para almorzar. Hay que reservar con antelación porque se llena cada día (lo cual es una buena señal). De lunes a viernes durante el día hay posibilidades de elegir menú (14,50€ por el momento). Para nuestra grata sorpresa las bebidas que se incluyen son: botella de vino, casera y agua (pero entran TODAS las bebidas, no es necesario elegir!!). Otra gran sorpresa es que las alubias con chorizo te lo sirven en una gran olla y tú te vas sirviendo hasta que explotes. El bonito con tomate estaba riquísimo, tenía un gran sabor y estaba super bien cocinado. El escalope de pollo estaba también muy rico, se cortaba solo y la capa de empanado estaba super bien hecho. Para la cena pedimos algo que volveríamos a pedir: a coliflor en temperatura (que ricura!), los calamares rellenos de manitas de cerdo estaban muy rico aunque me faltó cantidad. La hamburguesa estaba riquísima aunque a mi pareja le hubiera gustado más hecha (no preguntaron el punto de la carne y nosotros no caímos en decirlo). Por poner un pero diría que vi un poco caótico el servicio en mesa (nos pusieron la mesa pero faltaban los cubiertos (imprescindibles para comer) y el pan (no tan imprescindible, pero con las alubias pega un montón). En definitiva, muy rico y muy satisfecho. A nivel calidad-precio el menú está SUPER BIEN. A la carta, el precio no es el más asequible pero bastante aceptable. Volvería!

No me alojé en el hotel, solo comimos en el restaurante. Tuvimos suerte porque íbamos sin reserva y nos cogieron.La comida estaba rica pero era muy muy escasa.Pedímos salmorejo y eran casi dos cucharadas grandes lo que había en el plato.Y el bacalao una tajada pequeñita rebozado. La tarta de manzana fue lo mejor.La verdad que siendo el sitio que es y el lugar donde está le da un encanto pero por favor aunque el menú del día sea barato pongan raciones decentes.Gracias.

La habitación bien, (solo pasamos una noche). Habitación sencilla, cómoda, amplia con lo necesario. En el baño secador, dos toallas de mano, dos de ducha (eche en falta una para los pies a la salida de la ducha). Lo único que marcaba bañera de hidromasaje en la reserva y era una mini ducha. Nos alojamos en la primera planta. El tema del restaurante cafetería parece que lo tienen bastante dejado, ya cuando entras en recepción lo primero que te encuentras son tarjetas de recomendación de otro restaurante. No te explican absolutamente nada, el personal bastante seco, mínimo horarios de desayunos comidas o algo del hotel. Las llaves hay que dejarlas en una caja transparente encima del mostrador que cualquiera puede cogerlas porque no hay nadie en recepción nunca, que no es nada malo pero podían entonces recogerlas en cafetería. Desayunamos en la cafetería, las mesas sucias de la noche anterior en la zona del restaurante y afuera. No tenian ni una moneda para cambio. Una pareja con un bebé limpiando la mesa para poder sentarse a desayunar. No había gran variedad para desayunar. El hotel por afuera es precioso y la zona del restaurante acristalada también, tiene mesas afuera y un parque. La zona para aparcar marcaba un parking pero no sabemos si se podía entrar ya que no explicaron absolutamente nada en ningún momento, entonces aparcamos afuera que habia algo de aparcamiento.

Restaurante de 10. Bonito y acorgedor ambiente, con una cristalera que rodea todo el comedor. Personal atento y cercano. Comida rica y elaborada. Precio realmente bueno con platos hechos con detalle. Recomendable 100%.

Bonito y tranquilo hotel en Galizano. Habitaciones funcionales y comida rica. Buen ambiente.

Un lugar genial para comer y muy buen servicio. La comida es excepcional y gran cantidad. El servicio es muy amable y agradable. María fue la persona que nos atendió y quedamos encantados. Volveremos seguro!

El hotel, habitación, limpieza y ubicación de 10. En cambio el servicio de cafetería y restaurante, un 1.....por culpa de los chicos q lo atienden...lentos....muy muy lentos....no te atienden, no te sirven, no te cobran.....si te sientas en una mesa, estas perdido!!!. Es mejor tomarte algo en la barra, así puedes insistir a los "ahoritas" para q te atiendan y te hagan caso. Una pena, porque el sitio, el edificio, las instalaciones son de 10. Y la comida está muy bien, pero es desesperante estar esperando mas de media hora para q te cobren después de haber insistido 4 veces.....