Restaurante la Sidreria en Benasque

Caro para el servicio recibido. Amabilidad la justa. Un restaurante asturiano sin cachopo ? Tal vez las fechas no eran las mejores pero la carne no viene de Marte. Lo siento, no volveremos a este restaurante.

Restaurante de visita obligada, su cocina me encantó! Y el trato es muy bueno.

Es el segundo año que repetimos en este restaurante, todo lo que hemos probado está muy bueno, se nota la calidad de los productos y la cocina casera. Las patatas al cabrales son muy recomendables, la salsa y el sabor de la patata son muy buenas, también hemos probado la lubina a la sidra, las gambas al ajillo, las croquetas…el año pasado probamos también los canelones y el cachopo, todo muy bueno! El postre tocinillo del cielo, una delicia!

Materia prima de primera calidad, tratada de forma impecable. Una larga experiencia y amplios conocimientos de la cocina tradicional, hace que dos mujeres asturianas, madre e hija, elaboren guisos cocinados con horas de chup chup, que te despiertan los sentidos. Si tuviera que destacar algún plato sería la lubina a la sidra, el impresionante arroz de bogavante, el bacalao a la asturiana, los chipios, las cebollas rellenas de bonito, el pulpo a la gallega..... en fin.... un auténtico festival. A todo esto, le añadimos un trato siempre amable y cercano. Recomiendo no perderse esta experiencia gastronómica si visita Benasque.

Justo hoy vine con mi familia a cenar.Nuestro último día en Benasque ,por recomendación vinimos y dimos con el sitio. La atención de sus camareros excelente,la comida brutal... Siempre encantados con Benasque y su gente. Recomendable venir aquí,por si gente,su comida,su local... 100% volveremos seguro

Riquísimo. Una atención excelente y muy buena alternativa al resto de lugares de la zona. Lo recomiendo 100%

Todo riquísimo. Platos muy variados y ricos. Gracias! Volveremos seguro

Recomiendo las patatas al cabrales y el cachopo 100%. El aliño del cachopo es increíble. Ha superado mis expectativas

La dueña y cocinera es de Gijón y su mano se nota en platos exquisitos como la lubina a la sidra. Hay otros platos menos asturianos y más universales. Fuimos en invierno de 2018. Dan cenas en dos turnos, con lo que a las diez tienes que dejar la mesa para el siguiente, algo ya habitual en sitios de esquí. Para repetir.

Buscábamos algo para picar a la hora de cenar, y encontramos un hueco en La Sidrería. Cenamos en la barra, ya que no quedaba más sitio, pero estuvimos muy cómodos. Pedimos unas gambas al ajillo, croquetas y las patatas con cabrales. Estas últimas muy ricas, patata casera. Vermut casero muy bueno. Recomendable. Para lo que buscábamos esa noche, cena picoteo, perfecto!! No puedo opinar del resto de carta porque no lo probamos, pero supongo que debe estar muy bien.