Restaurante La Espadaña Bulevar en Jaén

El camarero Javi un gran profesional y el trato inmejorable

Lugar estupendo lo recomiendo todo de 10

Comida muy rica, camareros como pollos sin cabeza. El ambiente muy ruidoso. Lo que menos me ha gustado es los cocineros sentados en el parque con el uniforme y fumando porros!!!! Espero que esto llegue al superior y ponga solución porque da pena que esa estampa se cargue el negocio.

Magnífico restaurante en el boulevard de Jaén.

Muy buen trato y profesionalidad del personal. Comida buena y sitio con diferentes ambientes.

Buena comida a buen precio, buen ambiente.

Segunda vez que acudimos al local ubicado en el bulevar, y en cuanto a nuestra última experiencia dejo la siguiente valoración: -Comida: Todo lo que hemos pedido rico, siguen manteniendo la calidad. Han sido varias veces las que hemos acudido también al local ubicado en el centro, y en relación a la comida ofrecida en el local del bulevar, se puede decir que mantiene la misma calidad. Siempre tendemos a pedir cosas que ya hemos probado, y alguna de las cosas que puedo aconsejar son: Ensaladilla de cangrejo, berenjenas, flamenquín de boletus, bolsitas de queso y gambas, risotto, solomillos, tartar de salmón o atún (aunque estos dos últimos los pedimos solamente una ve y no recuerdo bien la experencia). -Precio: correcto, relación buena calidad-precio. -Servicio: Es correcto sin más. En cuanto al servicio de los productos en mesa desde que los pides, han sido bastante rápidos, cosa que sinceramente se acumulaban todos los platos en mesa. En cuanto a la atención y amabilidad de los camarer@s, correcto o demasiado correctos, pero he echado en falta algo más de cercanía o esa amabilidad que te hace relajarte y sentirte en un poco en confianza de preguntar cualquier cosa, ya que parecen estar algo serios aunque luego te atienden bien. No recuerdo haber notado esto último en el local del centro. -Otro punto a favor es que de algunos platos te permite pedir media ración, lo que hace que puedas optar a probar más cosas sin llenarte tanto. Puntos que no me ha gustado tanto: -El cúmulo de platos que se nos dio por un momento en la mesa, con 3 raciones de manera simultánea que llegaron prácticamente a la vez, lo que hace que pierdan la temperatura los platos calientes antes de probarlos. En este aspecto mediría un poco el tiempo a la hora de servir los platos, ya que pedimos unas 5 raciones en total (todas diferentes) y nos la sirvieron en menos de 20 minutos. Que por un lado gusta que no tarden en servir, eso está muy bien, pero el acumular todo en la mesa no lo veo lo mejor. -Tienen un servicio atento en mesa, me refiero a que son rápidos en quitar los platos o bebidas que se han consumido (cosa que es buena), pero por otro lado daba más la sensación de meter presión para que comiésemos , acabásemos rápido y así pudiesen recoger cuanto antes. A los pocos minutos de dar el último bocado que había disponible en mesa, nos preguntan si en ese momento queremos algo más, y ante la negativa recogen toda la mesa lo más rápido posible y nos traen la cuenta sin haberla pedido, lo que literalmente es echarte. Estamos hablando que no habían pasado ni 5 minutos desde que dimos el ultimo bocado, eran poco más de las 11 de la noche (las raciones las pedimos a las 10:30), y no había nadie esperando a sentarte después. Sentir esta presión o rapidez en echarte, no te hace relajarte o disfrutar de la cena o comida.

Precios caros para la comida que ponen

La atención de los camareros de 10 pero la comida no tanto, para mí gusto un poco seca, el solomillo estaba seco y las patatas igual. Para el precio que tienen los platos le falta calidad.

Magnífico servicio, Javier creo q se llama el camarero, muy atento con nosotros