Restaurante la betrana en Cabra

Vinimos aquí para tomar un café, lo cual estuvo bien, e íbamos a esperar a que se abriera la cocina para comer en una mesa exterior. Sin embargo, el servicio nos desanimó por completo. Los camareros nos ignoraron, y cuando logré pedir la cuenta, el camarero tuvo que recordárselo dos veces. También vi a una mujer del servicio llevando a los invitados a la mesa con un cigarrillo en la boca, sin mucha elegancia.

La comida bien de cantidad y de precio pero muy mala. Pedí un sándwich que daba pena, el bocadillo sequísimo y la ensalada parecía una sopa. En cuanto a los camareros agradables, pero le pedía algo y tardaban mucho. Tuve que pedir una misma cosa varias veces y no por impaciente.