Restaurante Karmine en Vitoria-Gasteiz

Nuestro hijo nos ha invitado a esta experiencia y hemos disfrutado mucho de los sabores, las texturas, productos de calidad y cercanía... Las mesas de madera me encantan, un lugar agradable, tranquilo y el personal muy amable y profesional.

Según entras sientes un ambiente tranquilo, amplio pero acogedor. El servicio de 10, recogiendo los abrigos/paraguas y guardándolos en un ropero. El local tiene una decoración minimalista pero sin ser fría y con elementos artesanales. Poseen una carta de vinos muy extensa y para todos los bolsillos, de productores pequeños lo cuál le da un plus de exclusividad. En cuanto a la comida, se disfruta cada bocado. Obviamente, según los gustos de la persona habrá platos que se disfruten más o menos pero ningún plato defraudó. Cada plato tenía algún ingrediente o técnica inesperada lo que hace disfrutar aún más la experiencia. Nosotros elegimos el menú de 10 pases y terminamos saciados. Ayuda mucho el pan y mantequilla para untar que sirven para poder seguir picando algo entre platos. Estuvimos aproximadamente 3h pero en ningún momento sentimos que tardaron en sacar el siguiente plato, se hizo muy ameno.

Cada plato nos ha sorprendido gratamente y para los golosos 2 platos.

Desde que entras, hasta que sales hay un trato exquisito, el ambiente muy tranquilo y agradable, la degustación de los platos estuvo muy bien, con productos de temporada y de productores pequeños y de la zona, con cada plato, cubertería diferente. Un local que le distingue del resto de restaurantes, con una decoración inspirada en sus orígenes y en su familia. Todo un acierto!!!!

Karmine es un restaurante ubicado en Vitoria-Gasteiz que ofrece una propuesta gastronómica única y deliciosa. Su cocina se basa en la recuperación de las raíces culinarias alavesas y vascas, con toques de innovación y creatividad que sorprenden al paladar. Lo que más me gustó: La calidad de los ingredientes: Todos los platos están elaborados con ingredientes frescos y de temporada, lo que se nota en el sabor y la presentación de cada creación. La originalidad de los platos: La carta de Karmine es una explosión de sabores y texturas que te invitan a probar cosas nuevas y descubrir combinaciones sorprendentes. El ambiente acogedor: El restaurante tiene un ambiente cálido y agradable, perfecto para disfrutar de una cena romántica o una comida con amigos. El servicio impecable: El personal de Karmine es atento, amable y profesional, siempre dispuesto a recomendarte los mejores platos y vinos. La croqueta de bacalao es simplemente espectacular. El postre de chocolate es una verdadera delicia, y no te olvides de probar el pan casero, es delicioso."

Vaya descubrimiento!!!!! Tenía muchas ganas de comer en este restaurante del que me habían hablado muy bien, pero la experiencia ha sido incluso mejor de lo esperado. La comida, de 10, la atención exquisita, el ambiente estupendo para disfrutar de un menú de ocho pases durante casi 3 horas, los cafés de especialidad una maravilla, el precio muy muy razonable y acorde a la experiencia que vives y el maridaje de vinos... sin palabras. Si eres aficionada/o al vino, déjate guiar y pide que te sorprenda el sumiller y si te atreves con vinos diferentes -incluso internacionales-, acertarás.

Muy recomendable. Local acogedor decorado con gusto, trato inmejorable y una comida de km.0 original y de vanguardia. Amplísima carta de vinos. Merece mucho la pena.

Nos ha gustado mucho, productos locales tratados con cariño y con talento

Una propuesta espectacular! Fuimos a comer mi mujer y yo recomendados por unos amigos de Valencia (estábamos de viaje) y estamos deseando volver. Me ha gustado porque tienen muy claro lo que proponen y lo explican muy bien. Es cocina local actualizada y hecha con producto del territorio. Y lo más importante: está muy bueno! El trato es exquisito y se respira tranquilidad. Totalmente recomendable.

Lugar pequeño y tranquilo, con degustación de platos muy elaborados y variados. Tomamos el menú de 10 platos y, en general, muy originales y sabrosos. La carta de vinos muy original, abarcando más allá de las denominaciones clásicas. La atención excelente, y el precio acorde con lo que ofrecen.