Restaurante KAMÍN en León

El restaurante me ha dejado muy sorprendido gratamente. Escogimos el menú Kamín con maridaje. Cocina de altísima calidad, personal súper atento y agradable, ambiente relajado cuidando cada detalle. Mencionar también a la experta en vinos, que te explicaba la historia de cada uno de ellos. 3 horas y media de comida de 10. Estoy seguro de que, en breve, tendrán la estrella Michelín

100%recomendable, toda una experiencia gastronómica

Comedor con un ambiente fantástico, bonita decoración y muy buena distribución de las mesas El menú nos pareció de 10 con varios platos sorprendentes llenos de sabores, contrastes y texturas innovadoras y diferentes que nunca antes habíamos probado. El trato del personal es exquisito y poder verles trabajar en la preparación de los platos un auténtico gustazo. Realmente recomendable como experiencia en su conjunto. Repetiremos más temprano que tarde.

Lugar muy tranquilo y cuidado, el menú degustación excelente,buenos sabores y muy bien presentado, gran trato por parte del personal. Sin duda merece pagar lo que pide por el menú

Es uno de esos sitios a los q tienes q ir al menos una vez para conocer de primera mano el diseño aplicado a los alimentos. Cocina elaborada de forma creativa, con mucho cariño, con mucha calidad y unas presentación fabulosas. Tiene dos opciones de menú en función del número de platos… nosotros elegimos el menú corto (origen) y francamente quedamos muy bien… cantidad justa para disfrutar sin encontrarte luego “copado”. Nos encantó el menú q tenían en esta ocasión, se ve q lo cambian cada cierto tiempo, en especial los entrantes, un escabeche fabuloso, las carrilleras y un postre super digestivo y fresco. El personal de lo mejor del sitio, atentos, cariñosos y muy muy profesionales. Repetiremos sin duda

Un restaurante con identidad, pero con margen de mejora El restaurante tiene una personalidad única que me gustó bastante, aunque no llega a rozar la perfección. Para lograrlo, creo que es importante encontrar un equilibrio adecuado entre el coste del producto, la elaboración, la técnica y la experiencia final del comensal. La propuesta incluye sabores innovadores y combinaciones potentes en boca; algunas resultaron más acertadas que otras, pero en general son interesantes. Sin embargo, mi mayor crítica es la cantidad de las raciones. Los platos son tan pequeños que apenas dan para uno o dos bocados. Esto, en mi opinión, es difícil de justificar, especialmente cuando hablamos de precios como 22 € por una merluza que literalmente eran dos bocados, o 28 € por una albóndiga que apenas se podía saborear. Este aspecto me parece imperdonable y es el principal punto a mejorar. Todo lo demás fue excelente. El servicio fue rápido, atento, educado y muy paciente, lo cual agradezco especialmente porque íbamos con un niño de 2 años. En todo momento hicieron lo posible para que estuviéramos cómodos y bien atendidos. A pesar de las observaciones, volvería sin dudarlo, porque el esfuerzo y la calidad del equipo son notables. Les deseo un futuro brillante

Nos ha sorprendido gratamente este sitio, todos los platos bien elaborados, sabores muy acertados y bien de cantidad. El personal también muy agradable.

Excelente atención y precio increíble. El Menú de degustacion muy completo, disfrutamos de una experiencia muy grata y familiar. El escabeche fue el plato que más me gustó, sin duda repetiría, ojalá existiese uno en Madrid 🇪🇸.

De 10. Pedimos el Menú Origen porque éramos muchos y estuvo excelente. Avisamos de intolerancia a la lactosa y los cambios fueron geniales. Los cocktails muy ricos y el vino muy bien. El local con la cocina muy agradable. Muy recomendable

De 10. Toda una experiencia genial. Pedimos el Menú Origen y estuvo impresionante. Incluso los cambios por intolerancia a lactosa fueron muy ricos. Local muy agradable con una atención de 10. Muy muy recomendable