Restaurante Es Mirador, Botigueta d'Es Mirador en Santa Eulària des Riu

Es un restaurante pequeño pero acogedor. ¡Con una vista preciosa y una anfitriona tan entusiasta! Pedimos la parrillada para dos. Estaba bien sazonada y la porción era generosa. El postre que nos recomendó estaba delicioso.

Uno de los mejores restaurantes del norte de la isla. Platos típicos deliciosos. No se necesita reserva y el ambiente local está garantizado. Vamos todos los años.

La comida es deliciosa y la vista desde la ventana es igual. Es el lugar perfecto para cenar bien y disfrutar de las vistas. El personal es amable y atento.

Fue una buena experiencia, aunque podría mejorar. La comida es buena y las porciones no son muy grandes. Esperan que ya conozcas la carta de bebidas; no te la ofrecen. El ambiente es agradable, pero el baño afuera no es una buena opción.

Pequeño restaurante con aforo limitado y una hermosa vista de San Carlos. Amplio estacionamiento. Muy buena comida local, porciones generosas, servicio atento y rápido. Excelente relación calidad-precio.

Lo recomiendo muchísimo. Fuimos dos veces, ¡qué delicia! Raciones generosas y mucha mejor calidad que en los restaurantes de playa, que ofrecen platos pequeños y sin sabor por el mismo precio, con precios al menos un 30% más altos. El anfitrión es muy amable y atento. La decoración es elegante. El restaurante es ideal para niños. Recomiendo la lubina, las gambas y los entrantes en general. ¡Que disfrutes de tu comida!

Fuimos con otra pareja. Muy recomendable. Todo con muy buena pinta. Lo que pedimos riquísimo.

Comimos una paella de marisco estupenda, muy sabrosa, con varios tipos de pescado y verduras a la plancha de muchas variedades, todo muy bien cocinado. Bebimos Tinto Verano y cerveza. La chica que nos atendió fue muy amable, atenta y precisa. Los precios son altos, pero más bajos que en otros sitios de Ibiza (paella 26,50 € por persona).

Simplemente fantástico, nos sentimos muy cómodos. La comida está deliciosa. Volveremos.

Lo descubrimos de excursión por las calas de la isla y de casualidad nos apareció en maps. Al llegar nos atendió una mujer super amable que nos ayudó a pedirnos platos locales y estuvo muy atenta y servicial en todo momento. La comida estaba toda buenísima, el Flaó muy rico y el arroz de matanza también. Estuvimos en la terraza, eso sí con algo de calor donde los ventiladores quizás se quedaron un poco cortos, pero era entendible ya que fuimos en ola de calor. Sitio para volver 100%. Buenas vistas, servicio y comida a precios razonables y carta no muy extensa, como entiendo que debe ser.