Restaurante El Pecado en Gijón

Está muy bien. Tiene pocas mesas pero aún no está muy masificado. La carne buenísima y los calamares también. Lo recomiendo.

Realmente bueno, la comida estuvo increíble, el servicio fue excelente, nuestra camarera Caroline fue realmente servicial y amable, nos dio los mejores consejos y nos brindó el mejor servicio.

Pulpo a la parrilla con puré de boniato, de primero. De segundo, Picaña y Entraña. Bonita decoración. Buena atención de camareros. Es recomendable reservar con antelación. Volveremos pronto

Excelente. Calidad de producto, cercanía en el trato y un ambiente súper acogedor. Es nuestro restaurante de referencia en Gijón y nunca falla. Recomendable 100%, en especial las alcachofas.

Lugar bonito y agradable con buen producto y excelente atención

Es cierto que comer carnes premium no es barato, pero teniendo esto en cuenta, el gasto está más que justificado. Todo perfectamente explicado y elaborado... riquísimo, bien pagado cada euro. El servicio excelente, se desvivieron por explicarnos cada corte y que estuviéramos super a gusto. Muy, muy recomendable. Volveremos!!!

Además de la calidad de la comida quiero destacar el buen trato de su personal

LOS PEQUEÑOS DETALLES. Cuando tanto 5 en sus reseñas te crea una expectativa tan alta, te vuelves más crítico en tus opiniones, y cuando pagas de media el doble de lo que se publica pues lo mismo. El caviar de cecina exquisito, pero el trozo de pan a 2,80 un abuso. El vino ecológico Pago de Florentino (recomendado) no está a la altura del nivel de la carne, no tiene cuerpo suficiente. Las carnes muy buenas, el vacío mejor q el chuleton de vaca gallega, un poco flojita. Y el tomate de la ensalada de acompañamiento de los más simple del supermercado, con los super tomates q se pueden encontrar hoy en día. Postres bien, pero dado el nivel de la cuenta se podía invitar al menos a los chupitos. En resumen, buena calidad, pero precio algo elevado. Servicio atento y muy mala acústica.

La definición sería vulgar. Pese a las expectativas generadas, no creo que se hayan cumplido. Quitando la cecina que sí que es cierto que estaba muy rica (aunque algo elevada de precio para su nivel), las mollejas estaban excesivamente grasientas y las alcachofas recomendadas por el camarero también muy simplonas y nada destacables. Y por otro lado, el supuesto plato estrella, el chuletón, muy mediocre. No negaré que de sabor estaba rico, pero muy difícil a la hora de comer con mucha grasa y hebras cruzadas. Quizás fue mala suerte con la pieza. El servicio muy atento, quizás algo intrusivo en algunos momentos, pero sí que denota cierta falta de organización a la hora de servir los platos. En resumen, un sitio rico pero que no ofrece nada especial.

Muy buen servicio y buen género,nos orientaron muy bien y nos gusto mucho la elección. Variación de carnes y de cortes. Carta corta pero justa Todo muy bien presentado. La cecina extraordinaria