Restaurante Doña Jimena en Valdemorillo

Buen ambiente, servicio agradable y comida excepcional

Todo un descubrimiento, tantas veces q pase por su lado sin darme cuenta ni de que estaba, cena para dos en la terraza, buen servicio, buena calidad, buen trato.

Es la primera vez que venimos y ha sido toda una sorpresa , la comida buenísima en concreto el steak tartar… y Miguel ha estado todo el tiempo pendiente de nosotros sin que nos faltase nada. Todo un acierto, volveremos seguro

Todo muy bien. Comida estupenda, servicio estupendo, todo bien relación calidad/precio muy bien. Repetiremos sin dudas!

Todo muy rico. Calidad y precio equilibrado.Restaurante con calidad superior en productos ,servicio y calidad humana. Insuperable.

Un 5 estrellas en todo. Es lo mejor de Valdemorillo. El trato es excelente por parte de todos. Miguel súper atento con todos los clientes. Mucha educación y respeto. La relación con su personal de servicio (cocina, barra, camareros) se nota buenísima y éso se transmite. Y con respecto a la comida es de lujo. Está todo buenísimo y Alejandro (cocina) es genial. Siempre innovando. Y todo le sale buenísimo porque le pone mucho cariño. Mención especial al carpaccio que nos puso ayer. Me gustáis muchísimo chicos.

Uno de los MEJORES de VALDEMORILLO tenéis que probar costilla de buey y la PAELLA es fantástica

Restaurante de nueva apertura hace escasamente dos meses. Es una reapertura, cambio de gerencia y estilo. Lo han dejado muy acogedor, para tomar algo informal, comer, cenar y tiene una terraza estupenda para el buen tiempo. Tiene una muy buena relación calidad/precio y el personal es muy atento y profesional. Un buen lugar en Valdemorillo y recomendable. En verano en su terraza tienen música en directo.

A pocos le pongo 5 🌟 pero Doña Jimena sin duda lo merece! Natali, iris, Miguel, Alex etc son un equipazo y hacen que todo salga de 10! Y la especialidad el blanco de verano de 10.

Un lugar tradicional con alguna fusión de sabores donde te sientes muy bien atendido desde el principio. Ayer pudimos disfrutar de una cena estupenda, en su acogedora terraza, con 4 platos, mención especial al carpaccio de vaca como sugerencia, hecho por ellos, estaba espectacular; las zamburiñas, de otro planeta, buenísimas. La tarta de queso llena de cremosidad, como a mí me gustan. Y, cómo no, la atención se lleva la palma, profesionales y cercanos, se agradecen estos sitios donde se respira la buena hostelería, que, con tanto restaurante de moda, parece que se nos está olvidando lo que realmente importa en un restaurante. Hablo como hija de hostelero de toda la vida. Desde luego, volveremos a probar sus carnes, que, por lo que pudimos ver en otras meses, tenían una pinta buenísima.