Restaurante Casa Tino en Cádiz

Todo el personal superamable, la.comida buenisima y el servicio muy rápido. Un sitio con mucho encanto donde puedes probar todas las especialidades de Cádiz, sin gluten y sin contamimacion cruzada. Tienen 2 cocinas y el personal esta muy pendiente. Totalmente recomendable para celiacos.

La comida un10 pero la atención no se le puede poner puntuación excelente

Lo mejor, el servicio. Son muy amables, educadas y más buena gente que to' las cosas! Bravísimas! Volveremos!

Todo riquísimo y el servicio buenísimo.

María maravilla!!! Simpática y muy buena lectora .

El servicio genial. María simpatiquísima y dándonos información de todo. La comida sin gluten y sin contaminación cruzada muy muy rica. Echamos una magnífica noche.

Venía cuando era joven a desayunar a este establecimiento. Después de muchísimos años he vuelto y me han conseguido sorprender. Riquísimo todo, es más, espectacular. Las almejas, los gambones.... unas simples papas aliñás no pueden estar más buenas. Encima hemos tenido la suerte que nos atendiera María una jiennense-gaditana con muchísima profesionalidad y un encanto en el trato. Recomendable para celíacos y no celíacos. Amenazamos con volver para seguir degustando la magnífica carta que tienen. Qué orgulloso tiene que estar tu padre, Tino. La esencia no se ha perdido.

Desde que te acercas a la puerta el trato es superior.Tino nos ofreció sentarnos en su salón que tienen justo en frente de su bar "de toda la vida", que ofrece un ambiente muy tranquilo e íntimo , al que llegamos del brazo literalmente de María, una encantadora camarera que nos hizo de una improvisada cena, una experiencia realmente maravillosa. Volveremos y volveremos a volver. Gracias

La comida de este restaurante es deliciosa; recomiendo especialmente el arroz con tinta de calamar, las albóndigas de cerdo y las patatas. El restaurante tiene un ambiente estupendo, y María es maravillosa: muy paciente y atenta, te trata como a una amiga de toda la vida. Sin duda, volvería una y otra vez. 👍

Comer en Casa Tino ha sido una auténtica experiencia gastronómica. He probado ortiguillas en muchos lugares, pero las de aquí son, sin exagerar, las mejores del mundo: crujientes, frescas y con un sabor a mar inigualable. El arroz negro estaba espectacular: en su punto, sabroso y acompañado de un alioli que redondeaba el plato a la perfección. Toda la comida se notaba cuidada al detalle, con ingredientes de primera y una elaboración impecable. Algo que me sorprendió muy positivamente es que la mayoría de los platos en su carta son aptos para celíacos, lo cual es de agradecer y demuestra el compromiso del restaurante con una cocina inclusiva y de calidad. El trato del personal fue excelente, muy amables y atentos sin ser invasivos, y siempre dispuestos a explicar cada plato y resolver dudas. El postre final fue el broche perfecto para una comida redonda. En resumen, Casa Tino es un lugar para volver una y otra vez, y recomendar sin dudar. Una joya de restaurante donde se come de maravilla y te hacen sentir como en casa.