Restaurante Avenida en Formentera del Segura

Fantástico menú del día con abundante vino tinto de libre consumo. Excelente relación calidad-precio y un ambiente estupendo.

⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ De los restaurantes que ya no quedan. Servicio cercano, familiar, y comida hiper casera. Aquí ves primero a los del pueblo y luego a algún turista despistado… o no tan despistado. El día que fuimos había como 50-60 guiris en varias mesas —¡buena señal! El menú del día por 12 € no tiene rival. Comida sencilla, bien hecha, sin pretensiones pero con cariño. El dueño es majísimo, de los que te hacen sentir en casa, y todo el equipo va en la misma línea. Está en mitad del camino entre Orihuela y Guardamar, pero merece totalmente la parada. Todo son facilidades y cero postureo. Un sitio de los que ya no se encuentran. Ojalá más así. ¡Gracias por seguir haciéndolo tan bien!

Reservamos mesa para 9 para una comida familiar. Tomamos el menú del día (domingo). La atención y el trato del dueño espectacular, cercano, generoso, como de la familia, se nota que le encanta lo que hace, y lo hace bien. Toda la comida superbuena, servida el los momentos correctos y a todos a la vez. Platos abundantes. Pedimos varias bebidas y pagamos el menú: 25€/pax. Repetiría sin duda.

Un restaurante de comida española

La gran afluencia de clientes en este restaurante familiar demuestra su calidad y amabilidad. La cálida bienvenida de Rosario y José te hará sentir como en casa. La carta se centra en especialidades locales, como el gazpacho y los callos. Date un capricho... Gracias por este momento 😉

Comida casera y menú diario en general muy bueno, muy buen servicio y el trato cercano y excelente, así da gusto, El menú de fin de semana muy completo, variado y muy rico. Seguro que volveremos, los postres de la abuela exquisitos, lo mejor de la zona.

Un bar de los auténticos que mantienen la esencia de antes. Comida exquisita a un precio muy asequible. Volveremos pronto

Se come bien, en un ambiente agradable y con buen servicio

Comida muy buena y servicio excelente, aunque es bastante difícil comunicarse en otro idioma que no sea español; aun así, fueron muy amables. Vinimos el sábado por la noche y había un menú de 25 euros por persona con dos entrantes, plato principal, bebida y postre. Además, mientras esperábamos, nos sirvieron patatas fritas y pan de ajo con salsas.

Un bar de los que vale la pena comer una vez en tu vida, no he conocido unos camareros más simpáticos y agradables como los de este bar. La comida esta bien, todo casero, con muy buen calidad, seguramente volveré y se convertirá en unos de mis clásicos...