Restaurante Asador Espadin en Vélez-Rubio

Una auténtica delicia de comida, desde el tomate, hasta las carnes. Muy buen servicio pero desde luego lo que más resalta es la calidad de la comida. Nuestro punto de encuentro para comer siempre que vamos de viaje al sur. MUY RECOMENDABLE

Comimos súper bien! Buena calidad y precio elevado. El camarero nos recomendó el menú completo jejeje y lo hizo muy bien. Todo el restaurante pedia lo mismo: la ensalada con anchoas buenísimas, pan de la casa muy rico, las croquetas con queso y Almendras y el Chuletón a la piedra !

Hemos comido hoy 5 adultos y un niño. Lo primero mencionar que ambos camareros son amabilísimos y muy profesionales! Destaco la atención de Cristóbal Gaspar que ha estado muy atento con nuestro hijo. Nos han hecho sentir como en casa! La comida riquísima! Hemos comido tomate raf con anchoas y lomo curado de atún, croquetas caseras con queso, calamar a la plancha y chuletón con patatas y pimientos del padrón y para nuestro hijo pollo empanado con patatas. Todo casero, buena materia prima y excelente cocinado! Por último voy a destacar el flan casero que no os podéis ir sin probarlo. Una delicia! Mil gracias por todo y volveremos con la ensaimada!

Todo muy bueno y atención inmejorable

DESPUES DE MUCHAS VECES PASAR POR LA AUTOVIA Y VER ANUNCIADO EL ASADOR DECIDIMOS POR FIN RESERVAR. Lo primero agradecer el esfuerzo realizado por darme mesa con tan poco margen horario ya que llame la misma mañana. Despues no pudimos sentirmos mas agusto y como en casa ( con estufa y todo a nuestra disposicion ) y el servivio de mesa tanto de juan jesus y garpar ( hijo) un espectaculo. Gracias por las recomendaciones y sobre todo, Gracias por esa materia prima tan espectacular que teneis tanto en aperitivos como en carnes, ya que estaba todo increible. VOLVERE PRONTO. ENHORABUENA Y NO CAMBIEIS

El sitio no es barato pero es que el producto que tiene es de primera calidad. El dueño nos trató de vender para un matrimonio solo que ibamos el chuletón, unos cogollos con anchoas, creo, y unas croquetas. Pero solo había un tamaño de chuletón y para dos nos daba cargo de conciencia gastarnos según calculo, un poco mas de 100 euros en una pieza de carne. AL final pedimos tomate con anchoas solomillo de vacuno exquisito a 27,5 euros ,varias cervezas, agua, tiramisu todo para compartir y dos cafes solos. Nos costó 68 euros y nos invitaron a un helado de turrón buenísimo y a dos chupitos de hiervas de marca. El café solo es caro 2,50 cada uno pero te ponen un bombón helado y junto a helado de turrón te compensa de sobra. Nos atendieron para lo tarde que llegamos y lo agotados que estaban muy bien e incluso nos hicieron hueco para que no nos quedaramos sin comer ( ibamos de Alicante a Granada y se nos hizo tarde). Resumen, gran sitio y si sabes organizarte pidiendo, no te duele la cuenta. Pongo solamente tres estrellas en el ambiente porque había una familia grande de los que los maridos van en chandall y las mujeres tirando pan al suelo y papeles y cambiando el pañal a un niño en sala....Horrible el olor, no se si se dieron cuenta los camareros, pero cualquiera les dice algo.... Que paciencia hay que tener para ser hostelero.

Todo espectacular, lo recomiendo

Un clásico de la restauración, carnes espectaculares,platos abundantes y de calidad.El servicio profesional y amable.

La Calidad, la atencion del personal y servicio, la cercanía del propietario y la relación con el precio, espectaculares.

Hay dos cosas que me emocionan en esta vida; una media verónica de Morante y el chuletón que sirve el amigo Gaspar en El Espadín. Hay otros, pero ninguno como ellos.