D'berto en O Grove

Muy buena comida aunque no llegó a las expectativas a las que yo tenía para este restaurante Servicio inmejorable

Es la tercera vez que vamos, cada año nos acercamos a Galicia y venimos a cenar, aunque tenemos 9 horas de viaje, aprovechamos y nos quedamos unos días. Es un placer comer aquí, el restaurante es tranquilo, no tiene muchas mesas lo que permite que la atención sea muy buena. No nos hemos encontrado con familias con niños, siempre que vamos suelen ser grupos de amigos o parejas solas cenando. Este año pedimos de primero zamburiñas a la plancha y volvimos a pedir el bogavante en sus dos modalidades, el frito especialidad de la casa y el otro más natural, buenísimos. Después pedimos el pescado que nos recomiendan, nunca falla. De postre pedimos la tarta de queso que es espectacular y la macedonia con granizado de ginebra que es increíblemente refrescante y generosa, muy agradecida de poder pedir este postre, pues no puedo comer ni trigo ni leche. Los precios... pues los encuentro muy bien teniendo en cuenta la calidad de los alimentos, la cantidad que ponen y lo bien que lo hacen. Disculpad, las fotos no son buenas pero es que los 5 sentidos los tenía en la comida :P.

El mejor restaurante de España. Les deberían de dar una estrella Michelin. Tienen el mejor producto, mejor servicio y mejor ambiente. Cuidan todo muchísimo. Muchas gracias por vuestra atención!

Una gran experiencia, un ambiente muy agradable, mesas amplias y separadas para tener intimidad en tu grupo, Berto nos aconsejo para seleccionar la comida, fundamentalmente queríamos degustar los mariscos de la zona, nos explico las características de cada uno y alguno de los que pensábamos pedir nos dijo que estaban en tiempo de veda, asimismo nos sugirió uno que no conocíamos y que solo se pueden obtener una vez al año. Como plato principal pedimos el virrey o palometa roja, un manjar, y nos sugirió que pidiéramos solo 1/2 pescado ya que con lo que habíamos ordenado era suficiente, como entrante sopa y empanada gallega que es la especialidad de su hermana Marisol. 3 personas para atender la mesa, cada uno con una función distinta, al terminar cada tipo de marisco cambiaban los platos para que no se contamine el sabor. Almejas, zamburiñas, santiagueños, calamares, navajas, percebes, antes del pescado cambiaron las servilletas y trajeron toallas húmedas para limpiarse las manos. De postre filioas de chocolates, un mix de frutas y la torta de queso especialidad de Marisol. El personal muy profesional y atento. Disfrutamos de una muy alta cocina y una atención acorde. Sin duda un lugar para regresar

Una gran experiencia, un ambiente muy agradable, mesas amplias y separadas para tener intimidad en tu grupo, Berto nos aconsejo para seleccionar la comida, fundamentalmente queríamos degustar los mariscos de la zona, nos explico las características de cada uno y alguno de los que pensábamos pedir nos dijo que estaban en tiempo de veda, asimismo nos sugirió uno que no conocíamos y que solo se pueden obtener una vez al año. Como plato principal pedimos el virrey o palometa roja, un manjar, y nos sugirió que pidiéramos solo 1/2 pescado ya que con lo que habíamos ordenado era suficiente, como entrante sopa y empanada gallega que es la especialidad de su hermana Marisol. 3 personas para atender la mesa, cada uno con una función distinta, al terminar cada tipo de marisco cambiaban los platos para que no se contamine el sabor. Almejas, zamburiñas, santiagueños, calamares, navajas, percebes, antes del pescado cambiaron las servilletas y trajeron toallas húmedas para limpiarse las manos. De postre filioas de chocolates, un mix de frutas y la torta de queso especialidad de Marisol. El personal muy profesional y atento. Disfrutamos de una muy alta cocina y una atención acorde. Sin duda un lugar para regresar

No pongo mas estrellas porque no se puede! Es ESPECTACULAR, desde que entras hasta que sales , el servicio, el somelier, la calidad y el tamaño del producto . Berto te aconseja súper bien a la hora de elegir y en las cantidades y disfrutamos un monton. Estaba todo delicioso, una de las especialidades el bogavante frito es una maravilla y de Postre la tarta de queso estaba brutal. Sin duda si volvemos a O’grove en otra ocasion ya sabemos donde iremos a Comer.

Lo único que puedo reseñar a mejorar, es que nos hubiera gustado como en muchísimos sitios mostrarnos el bogavante. La tarta de queso espectacular..cómo todo el género que disfrutamos.

Espectacular!! El mejor marisco que he probado… todo riquísimo, y el servicio un 10!!

Esperábamos mucho probablemente debido a tantas recomendaciones. A pesar de que todos los clientes eran turistas, aun así fue agradable. Pedimos la langosta frita especial de la casa. Se cortó en trozos y se frió con aceite de oliva. Sencillo pero muy bien hecho. No demasiado cocido y tierno. La carne se desprendió fácilmente del caparazón. El centollo estaba bueno pero nada especial.

Almejas a la sartén,bogavante frito y un cogote de palometa roja,todo espectacular,así como la tarta de queso,muy buen servicio y buen pan.hasta la próxima