D'berto en O Grove

Restaurante excepcional, si te gusta el marisco y pescado este restaurante es único en España, su producto no lo verás en ningún otro sitio. Top top

Experiencia gastronómica completa. Un lujo de restaurante con una calidad increíble en los productos del mar, que por supuesto , se paga. Aunque el trato es estupendo, creo que por el tipo de restaurante y precio, aún podía ser un poquito mejor. Por cierto, probablemente la mejor tarta de queso que haya probado nunca.

En esta vida, hay tres sitios donde uno siempre va a querer estar: El cielo, un retrete cuando te vas por la pata abajo y superándolos a ambos, en D'Berto. La comida ( acepten siempre la sugerencia del día) con esos pescados en talla y calidad ÚNICOS no sólo en Galicia si no en Europa entera. Y un servicio amable y amigable, mención aparte al sumiller por su conocimiento y simpatía, hacen que esté lugar sea LA REFERENCIA en lo que toca a pescados y mariscos. El precio?? Acorde con la calidad. Una maravilla

Experiencia muy recomendable si te gusta disfrutar de un producto de primerísima calidad y bien cocinado. Sin florituras, ni ornamentos excéntricos. Personal muy atento y cercano. Uno de esos lugares de referencia que sabes que nunca falla.

Pedimos el menú de degustación , fue una experiencia maravillosa. Productos de máxima calidad preparados con delicadeza, aportando solo lo necesario para resaltar el sabor de lo que el mar generosamente nos otorga. Parada obligada en O Grove.

No me había pasado en la vida, jamás , que absolutamente TODO estuviera tan extremadamente rico! Y qué tamaños ! Hemos disfrutado muchísimo

Al traspasar la puerta de D’Berto, entras en un templo del mar: acuario impresionante, selección del día en cámara, suculentos ejemplares cuidadosamente seleccionados por Berto. Cada plato refleja la frescura del Atlántico: percebes como puños, cigalas que recuerdan mini‑langostas, centollas, navajas, almejas… todo cocinado “a su punto”, realzando la esencia del producto sin artificios. Destacan la cigala a la parrilla, el bogavante frito y guisos de marisco con carácter auténtico. El servicio acompaña de forma impecable: cálido, profesional y atento, recomendando vinos locales (más de 250 referencias) que encajan a la perfección con cada bocado. El ambiente es acogedor, ideal para disfrutar largo rato de un festín marino sin prisas. No es barato pero la experiencia lo justifica, por la calidad excepcional, tamaño de las raciones y la combinación de sabores y vinos. Me llevo el recuerdo de mar a flor de paladar y ya estoy deseando volver para deleitarme nuevamente con sus sabores.

Templo del producto que no defrauda. Sentirte como en casa disfrutando del sabor del 🌊 en cada bocado. Nosotros queríamos probar un poquito de todo, almejas, navajas, berberechos, empanada y coronar la comida con la especialidad de la casa, el bogavante frito que en nuestro caso era una 🎀 con sus huevas toda una delicia. Visita obligada si vienes a las Rías Baixas. Gracias por la atención y la recomendación en todo momento, volveremos seguro! Comida, 2 personas, 112€/pax.

Nada que añadir aquí, este es uno de los mejores restaurantes de mariscos del mundo.

Nos gustó tanto que al día siguiente repetimos. Calidad exquisita, el salpicón de bogavante es probablemente lo mejor que he probado en mi vida y el postre de macedonia de frutas con granizado, simplemente increíble.