Restaurant Voramar en Sant Feliu de Guíxols

Clientes hace muchos años. Es un negocio familiar que mantiene la calidad y buen trato a través de generaciones. Como en casa

Muy buena atención del personal, buena comida y ambiente tranquilo.

Servicio, comida y trato de 10 sobre 10!

La verdad es que ha sido todo buenísimo y el servicio Perfecto. Gracias

Buen ambiente, buen servicio, menú excelente

Estupendo fuimos con un grupo i muy contentos !!!El servico de 10 , compartimos diferentes platós d,entantes!Genial el magret i el Llenguadoc Excelente calidad/precio

Muy amables, muy rápido y muy bueno

Excelente Menú Paella en Voramar de S'Agaró Si estás buscando una opción de paella fantástica en S'Agaró, no te pierdas el Menú Paella del restaurante Voramar. Por 22€ (bebidas no incluidas), ofrece una experiencia culinaria muy completa y satisfactoria. El menú empieza con un pica-pica variado y generoso: nos sirvieron mejillones frescos, berberechos en su punto, unas rabas crujientes y una ensalada muy agradable con queso de cabra. Una forma deliciosa de abrir boca. Como plato principal, la paella es la estrella. Pudimos elegir entre paella de marisco y mixta, y la paella de marisco estaba realmente espectacular. El arroz en su punto, con mucho sabor a mar y una buena cantidad de ingredientes. ¡Totalmente recomendable si eres amante del marisco! Para cerrar, la variedad de postres es muy buena: desde el clásico flan de huevo y la crema catalana hasta profiteroles, flan de coco o un refrescante helado de turrón. Hay opciones para todos los gustos. En resumen, el Menú Paella del Voramar ofrece una relación calidad-precio muy buena, destacando por la calidad de su paella y la variedad de sus entrantes y postres. ¡Una elección acertada para disfrutar de la cocina mediterránea!

Una horrible ensalada gitana, adornada con aceitunas deshuesadas y zanahorias laminadas, de lo más contundentes. Una camarera cansada, con cara de disgusto y grandes pechos, me los ponía en la cabeza por detrás cada vez que sacaba el plato y ponía la mesa. De los 15 platos que pedimos (entrantes y ensaladas), solo dos platos de pescado caliente parecían normales y estaban deliciosos: merluza al ajillo y lubina a la plancha. Ojalá las fresas con nata y sorbete de limón fueran comestibles, aunque es difícil echarlas a perder. El resto es como en una cafetería barata para turistas. Esperábamos una comida deliciosa, ya que no hay vistas (en segunda línea de mar, en los patios), pero no.

Paseando encontramos este restaurante y pudimos comer ya que estaba lleno, nos pedimos un menú de fin de semana y era completo ya que el primero era una combinación de moluscos, de segundo nos pedimos una paella mixta que a nuestro gusto estaba un poco pasado, la atención muy amable, así que repetiremos para poder tener una valoración mejor escogiendo otros segundos, lo recomendamos