Restaurant Treio en La Vall de Boí

Servicio muy rápido, y la comida buenísima. Vinimos a la fiesta del Cronoboulder, con el restaurante lleno, y nos atendieron y nos serviron súper rápido. Un gran acierto.

Muy buenas tapas a muy buen precio, grandes porciones y un servicio amable.

Comimos en el restaurante, está genial la comida es muy buena, y a un precio muy correcto para la Vall. Es fácil caer en la tentación del pulpo. La Llonganisa, los Pimientos Rellenos y el pulpo una delicia, y las vistas hacia la Hermita de Boi, un placer a la vista.

Espectacular: conida ( mi cuit, ensalada de ventresca atún), galtes a la miel y peras y las costillas de cerdo glaseadas.. para repetir!

Recomiendo las croquetas de cola de buey y el estofado de ternera.

El restaurante es una muy buena opción para el almuerzo, el desayuno o la cena, el trato de parte de Tere impecable y la comida exepcional. Además gran parte de la comida es casera. Muy recomendado!!

El ambiente, la comida y la amabilidad de Tere me obligan a puntuar el establecimiento con 5 estrellas sin duda. La gran mayoría de cosas es casero, ¡hasta el pan! Infinitamemte recomendado!

Comimos allí. La recepción, los asientos, el pedido de bebidas y comida fueron bien y cortésmente. También es muy cómodo sentarse allí. Estaba bastante lleno: el personal de servicio estaba estresado. La sensación cambió después de que nos quejamos de una comida. Pedimos una sopa catalana. También pedimos una sopa de fideos tradicional. Eso sí, sin albóndigas ni garbanzos. El caldo no tenía sabor, ¿solo agua con un poco de aceite? No se podían saborear cebollas, puerros, zanahorias, repollo, etc. Por la noche tomamos la misma sopa en nuestro hotel, con el sabor y las albóndigas como debe ser. Cuando le preguntaron al camarero sobre esto, fue grosero y le preguntó si debería traer pimienta y sal ahora. ¡La sal no puede mejorar ningún sabor! Entonces básicamente nos ignoraron y ya no nos atendieron. Gestión de reclamaciones no disponible... Pensé en esta reseña durante mucho tiempo. Al final me decidí por un benévolo tres estrellas.

Restaurant en la zona de la vall de Boí con excelentes vistas desde la terraza exterior y dos zonas de comedores dentro. Dispone de un menú diario y carta con platos típicos de la zona y que puedes pedir para compartir también. La comida en general nos gustó mucho, en especial los cargols a la llauna, espectaculares! Hay un pequeño aparcamiento cruzando la carretera dónde puedes dejar tu vehículo.

Buenísimas tostas de anchoas y hamburguesa enorme. Precio algo alto, pero acorde con la cantidad recibida. El servicio perfecto en la terraza, con la vista de la iglesia románica.