Restaurant L'Ermita - Hotel Gran Sol en Sant Pol de Mar

Excepcional comida y excelente trato

Un restaurante-escuela de hostelería con gran prestigio, tanto en Cataluña como internacionalmente, y que es siempre un placer visitar de nuevo año tras año. Forma parte del Hotel Gran Sol y es una de las razones que nos hace repetir estancia en el pueblo. La acogida ya te hace sentir especial: nos obsequiaron con unas aceitunas (un detalle muy mediterráneo que, cuando viajo, echo de menos —¡excepto en Italia!) y una bebida sin alcohol a base de té, muy fresca y agradable. Los platos muestran creatividad y oficio. Compartimos unos espaguetis negros con boloñesa de pop y un bollo de ensalada rusa (Oliver, internacionalmente conocida) con gamba y alioli de sagrano —una especie de roll de gamba delicioso. De segundo, una escórpora (scorpionfish… por si Google no lo traduce bien) a la donostiarra con patata panadera, cocinada con maestría. Y de postre, probamos el pastel de fresa, el cheese cake y el coulant. En mi opinión, el nivel de la comida está por encima del del postre: bueno, sí, pero con margen para llegar al nivel de los platos principales. En cualquier caso, prefiero que así sea —es mejor que la comida brille por encima de la dulzura final. Un sitio que combina aprendizaje y alta cocina, y que nos gusta mucho redescubrir cada año. ¡Altamente recomendable!

Como en anteriores ocasiones disfrutamos tanto de la comida como del paisaje. Nos atendió Josep Sala que nos aconsejo y nos dio un estupendo servicio. Recomendable 100%

Este restaurante con personal de la escuela de hostelería de Sant Pol es un buen ejemplo de lo que hay que hacer, unir la formación con las prácticas reales.... un 10.

Fuimos a cenar el local es mas de dia tiene grandes ventanales pero por la noche no se lucen,local muy sencillo atencion muy atenta y nos sorprendió al ver camareros jovencitos (es una escuela de hosteleria) platos ricos y donde se nota en presencia el mimo que los chicos ponen..una buena iniciativa para crear empleo y formación!

Un gran hotel en sus días de gloria que están a una reforma de volver a ver sus mejores días. Un servicio de restaurante espectacular, gran labor de los estudiantes y maestros.

Todo muy bonito. Un poco caro pero vale la pena. Los platos no son muy grandes así que si van con hambre quizá elegir menú no es lo mejor. Pero en líneas generales es muy bueno.

Celebramos un cumpleaños y todo el equipo hizo un trabajo excelente para que fuera un día perfecto. Cada detalle estuvo cuidado, el ambiente fue inmejorable y nos hicieron sentir como en casa. Queremos dar las gracias a todos por su dedicación y, en especial, a David, cuya atención y profesionalidad marcaron la diferencia. Fue una celebración inolvidable.

Excelente servicio y atención, la comida muy buena y no esperamos mucho entre pases.

La mejor comida que encontramos en la zona. Muy buen servicio. Estábamos en el hotel y vinimos solo para ver qué ofrecían, y nos llevamos una grata sorpresa.