Restaurant Ca l'Isern en Sant Feliu de Guíxols

Menú con muy buena relación calidad/precio

Un lugar totalmente recomendable,nos han atendido correctamente. La comida de 10 y sobre todo el chucho con un toque a la brasa espectacular. Con una relación calidad precio insuperable. Volveremos.

Restaurante familiar tradicional. Buen ambiente interior. Productos variados y de calidad muy bien elaborados, con profesionalidad, saben lo que tratan y como sacarle el mejor partido, sobre todo las carnes. Cuidan mucho la presentación de los platos, alguna de ellas con personalidad. Excelente atención y muy buen servicio, rápido y personalizado. Muy buena relación precio-calidad. La web es muy intuitiva, rápida y fácil de utilizar, los contenidos están muy bien diseñados.

Local, acogedor, generoso, delicioso, salí encantada

Menús excelentes. Carne a la brasa estupenda.

El Ca l’Isern es uno de esos restaurantes que ya forman parte del alma de Sant Feliu de Guíxols. Abierto —según cuentan— desde 1954, es todo un clásico de la cocina catalana tradicional, con ese estilo de casa de comidas de siempre, donde la brasa es protagonista y el ambiente rezuma historia y autenticidad. Su propuesta es la de siempre, sin pretensiones pero con fundamento. Los fines de semana ofrecen tres menús (25, 28 y 32 €, bebidas aparte en todos los casos) que comparten una buena selección de primeros platos: desde un cóctel de gambas clásico hasta canelones caseros, torradas con anchoas o ensaladas variadas. Hay opciones para todos los gustos, bien elaboradas y con ese punto nostálgico de cocina de domingo. Probé los canelones, que estaban correctos, suaves y caseros, sin grandes alardes, pero agradables. De segundo, el costillar de cerdo a la brasa, con un sabor potente y una carne tierna y bien cocinada, que se deshacía fácilmente del hueso. Un plato sabroso y bien hecho, aunque —como el resto— sin ese punto mágico que lo haga inolvidable. Los postres caseros siguen la misma línea: sencillos, buenos y honestos. Nada espectacular, pero se agradece encontrar elaboraciones tradicionales que huyen del industrial. El local mantiene ese aire clásico, no demasiado grande, con una disposición algo estrecha y alargada, tipo tubo, pero acogedor. En cuanto al servicio, en mi visita lo encontré un poco lento, quizás fruto de un día con mucho movimiento. En resumen, Ca l’Isern es un restaurante típico, de los de toda la vida, donde se come bien y a buen precio, con una relación calidad-precio más que correcta. Es de esos sitios que no buscan impresionar, sino alimentar bien, y lo consiguen. ¿Lo recomiendo? Sí, especialmente si te gusta la cocina catalana tradicional y la brasa bien hecha. No es un restaurante que te cambie la vida, pero sí uno de esos lugares donde sabes que vas a comer bien y salir satisfecho.

Delgadas platos, según platos todos muy buenos, los caracoles buenísimos 😋 Volveremos.

Buena comida, bien servida y en un ambiente agradable. Creo que el menú debería incluir 1 bebida. 1 cerveza casi 3€, botella 1l de agua casi 4.

Las carnes a la brasas buenas, los postres caseros y originales Varios menus para elegir segun presupuesto desde 24€a 60€ buena relacion calidad -precio

Una característica de la calidad es la consistencia. Y este restaurante entrega esto en picas. Hemos comido aquí muchas veces en los últimos 10 años y nos maravillamos de la alta calidad consistente de la carne a la parrilla de carbón. Aquí tuve la carne de cerdo de mejor calidad que he comido. En nuestro último almuerzo, comí pato que estaba muy bien cocinado - ver foto - junto con un buen entrante - las anchoas - y una buena crema catalana de postre