Quiosco Fuente del Seminario en San Lorenzo de El Escorial

Tomar algo entre pajaritos y árboles, pero no está sobreexlotado y respeta el entorno Piensan pequeño para bien, carta reducida pero muy lógica para sacarlo todo a tiempo suficiente personal bien organizado y un encargado afable Las patatas fritas saben caseras con aceite limpio Eso sí, que te gusten los perros pq en cada mesa hay uno con su cuenco porque el sitio se presta para ir con peluditos Tirón de orejas a los clientes fumones que se levantan para no ahumar a su mesa pero le echan el humo al de al lado y luego tiran la colilla al suelo QUE ESTÁS EN UN PARAJE NATURAL JOSELUIS

Llegamos a las 16h y afortunadamente nos sirvieron, pese a que ya estaban recogiendo. Comimos huevos con longaniza de trompetas de la muerte y ensalada quisco y dos cafés. Todo muy rápido y muy rico. El lugar es fantástico y el personal muy amable.

Muy buen producto, el lugar es ideal y está bien de precio, llegamos por casualidad y ha sido una suerte. Además de que nos atendieron a eso de las 4 un domingo. Sitio muy recomendable. Si viviéramos en Madrid lo tendríamos de cabecera

Los huevos, la longaniza, los pimientos y las patatas eran justo lo que pedía el momento. Y el ambiente arbolado y al aire libre es agradable.

Sitio increible. De huesca. Especilidad la longaniza. Muy buen sitio para ir con sitio y con abrigo que a la sobra hace frio

Esplendida terraza en medio de la herreria para disfrutar de una buena carta. La longaniza de Graus deliciosa,Buenas tostas y chuletillas. Bien y amablemente atendido rodeado de una fabulosa vegetación.

Acabamos allí de casualidad. ¡Fue una suerte! Riquísimo todo lo que pedimos. La atención de los camareros inmejorable y el entorno muy agradable. Ya tenemos sitio para comer cuando vayamos a El Escorial.

Imprescindible. La comida ha evolucionado a mejor.

Un sitio agradable para una noche de verano. Comida aceptable a un precio razonable.

Lugar con encanto (al mediodía se tiene la impresión de comer en un cuadro impresionista); comida casera y sencilla pero auténticamente muy, pero que muy buena; y el servicio excelente: muchas gracias, Irene.