Prisma en Vallehermoso

Comimos una paella para dos personas y fue INCREÍBLE. El personal estaba quizás un poco cansado por la noche y les faltaba energía y sonrisas (que definitivamente teníamos) :) En general, volvería a visitar este lugar :)

¡Platos de pescado sencillos pero excelentes en una preparación sabrosa! Me gustan especialmente los que se ofrecen por peso, aquellos que rara vez se ofrecen con la típica vista isleña de la bahía.

¡Un lugar mágico en La Gomera con un ambiente canario único! El restaurante pasa desapercibido. Escondido entre casas en alquiler. El ambiente es para los amantes de las tabernas, no para los interiores lujosos: aquí no hay ninguno de esos. Comí besugo aquí: era excelente, fresco y perfectamente preparado. Los chipirones son otro éxito: delicados y llenos de sabor, realmente maravillosos. El restaurante ofrece una hermosa vista del océano, lo que crea una atmósfera increíble. El lugar rezuma energía positiva y verdaderamente canaria. Si estás en La Gomera, no dejes de visitar este lugar: ¡es una auténtica joya!

El queso estaba muy rico, ya que sólo estaba cortado;-). La ensalada estaba bien. La pechuga de pollo y las patatas fritas estaban buenas. El servicio ya había tenido una larga jornada de trabajo y por eso ya no estaba de tan buen humor. Nos sentimos un poco agotados. Precio demasiado alto, pero una excelente ubicación.

Un sitio bien alejado pero que merece la pena si se quiere comer buen pescado fresco. Además muy rico el queso asado con miel de palma de la zona. El vino de la casa muy rico, blanco afrutado.

Rica comida, buen precio al lado de la playa. Excelente los champiñones

Lo cierto es que me sorprendió mucho el lugar. La comida estaba muy rica, no había casi nadie (algo que muchas veces se agradece) y un sitio súper relajante con el sonido del mar. Las chicas que me atendieron fueron súper amables y agradables.

Todo correcto, bar restaurante, comes en una terraza en el pasillo que da a la playa, buen pescado

Restaurante con una pequeña terraza en el callejón por el que se baja a la playa desde el aparcamiento de la carretera. Ni siquiera optamos por intentar comer dentro del restaurante pues teníamos claro que parte del aliciente de comer aquí era hacerlo mirando al mar, como todas las mesas estaban ocupadas tuvimos que esperar unos minutos pero la espera mereció la pena ya que pudimos sentarnos en la mesa mas avanzada junto a la escalera de acceso a la playa y allí la vista del mar era impresionante. Pedimos: Ensalada mixta (10,00 euros), muy abundante y colorida por su gran variedad de productos frescos y crujientes. Pescado fresco del día (30,00 euros/kg.), elegimos un burro que resultó estar delicioso, venia además acompañado de una abundante ensalada y de un plato con muchas papas arrugadas y de dos vasitos con mojo, verde y rojo, aunque los dos estaban muy buenos el rojo nos pareció sobresaliente. Frasca de medio litro de vino blanco seco de la tierra (6,00 euros). El servicio de mesa fue muy bueno.

Pescado Fresco. Carta variada y precio acorde a la calidad. . Arroz paella Correcto y chocos muy frescos. Buen servicio. Terraza con mesas en una escalera finde se divisa el atlántico.