⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ ¡Una experiencia de 10 en Popeyes!
Salí muy satisfecho con todo: la comida, la atención y el ambiente. El pollo estaba espectacular, como siempre: crujiente, jugoso y lleno de sabor. Pero lo que realmente marcó la diferencia fue el personal, que fue excepcional.
Quiero destacar especialmente a Estela, que me atendió con una amabilidad y profesionalismo increíbles. Se nota cuando alguien disfruta de su trabajo, y ella fue atenta, rápida y muy simpática. ¡Un verdadero ejemplo de buen trato al cliente!
En general, todo el equipo fue muy amable, atentos desde que entras hasta que sales. El local estaba limpio, el servicio fue rápido y el ambiente muy agradable.
Popeyes no solo destaca por su comida, sino también por su gente. Si buscas una experiencia completa, este es el sitio. ¡Repetiré sin duda!