Plaza XXI en Teruel

Si buscas un sitio donde te traten como rey sin tener que hipotecar tu castillo, este restaurante es tu lugar. La atención es de esas que casi te hacen sentir culpable por no dejar propina en oro macizo, el ambiente tan agradable que dan ganas de mudarse con mesa y todo, y la comida… ¡ay, la comida! Calidad muy por encima del precio, y una ensalada de rulo de cabra con plátano frito que merece una ovación de pie: dulce, salada y crujiente, como un concierto bien afinado. ¿El pero? El agua en botella reutilizable. Sí, muy eco-friendly y todo lo que quieras, pero cuando uno paga por un festín, espera abrir la botella y escuchar ese “psssh” glorioso de lo nuevo. Aquí el agua parece que ha vivido más aventuras que uno. En resumen: vayan, disfruten, y pidan la ensalada. El agua… bueno, tómenla como parte de la experiencia.

Las raciones abundantes y con buena presentación, relación calidad precio muy buena. Ubicación excelente. Rapidez en servicio valorable ya que además vinimos un poco tarde y nos atendieron encantados. Por poner un pero, los camareros aunque muy amables no parecían ser muy profesionales y se hablaban entre ellos a voces y con risas hacían jaleo. No obstante repetiremos si volvemos a la ciudad

Es aconsejable pedir "paticas de calamares" la camarera que nos atendió muy desganana, el postre natillas caseras nada recomendables lo peor junto con la camarera

Muy buen producto, ternera de verdad y NO del supermercado. Le doy un 10\10 que siendo galego cuenta como un 11. Mención especial a LEIRE, una gran profesional que va a mil sin perder el buen trato. Profesionales así dignifican este oficio, se merece un sueldazo. En Coruña tienes trabajo, impresionante

Tomamos el menú del día en la terraza. El servicio rápido, atento y bien. El arroz no me terminó de convencer, sobre todo por el tipo de arroz. El jamón, un poco escaso. De segundo fueron carrillada y codillo y estaban francamente bien. Compensaron a los primeros. El postre correcto.

Menú 17,90. El ternasco fatal, para llevar un suplemento de 5 euros esperaba algo mejor. La carne nada tierna, parecía una suela de zapatos, con el añadido de que la han sacado casi fría. El resto de los platos bien

Para un picoteo muy bien, el personal de servicio muy eficiente y amable

Cocina excelente... Sencilla pero sabrosa... Camarera sonriente, sin esperas, muy eficiente... Dentro... Lejos del ruido... ¡Lo recomiendo!... No te pierdas las albóndigas y las alcachofas (realmente muy buenas 👍)

Hemos cenado 3 noches, la comida bien, recomiendo las patucas de calamar, las patatas bravas aunque están buenas la ración la considero demasiado grande para dos, la ensalada de ventresca el atún a mi modo de ver está un pelín salado. El servicio está bien son atentos y amables

El personal fue amable, aunque no hablábamos muy bien español. El menú es muy variado en comparación con los restaurantes cercanos (es decir, no solo de cerdo). Los precios son razonables. El pescado estaba un poco seco, pero muy sabroso.