Pilar del Toro en Granada

Un lugar donde reina una paz y un ambiente repleto de armonía y buen comer. El servicio magnífico y sus platos espectaculares. Volveremos pronto!👏👏👏

¡Una auténtica joya muy recomendable para un restaurante típico granadino!

locale vicino a piazza nuova all'interno di un palacio con cucina tradizionale; molto buona la coda di toro. Porzioni abbondanti e costi, in particolare quelli delle bevande, abbordabili. consigliato per chi vuol stare in centro e non ama i locali turistici

Muy buen trato en todo. La comida muy buena y con un buen producto. El precio muy bien

Sencillamente; espectacular…, el lugar precioso con un encanto increíble, la calidad de la comida buenísima y la atención del jefe se sala sobresaliente. Cenamos el jueves santo y repetimos al día siguiente. Cuando volvamos a Granada volveremos sin dudarlo.

Pese a haber cambiado bastante desde mi última visita hace muchos años, es reconfortante comprobar que sigue siendo un excelente restaurante o dónde tomar unas copas totalmente relajado en un patio andaluz muy bien cuidado y tranquilo. Atención exquisita y platos de altísimo nivel

Vinimos una pareja con un niño pequeño, fuimos muy bien recibidos. El entorno es magnífico. La cocina es fina y refinada. Nos divertimos.

Il cameriere è stato di una gentilezza rara. Ci ha consigliato senza sbagliare un colpo: quel controfiletto era davvero speciale

Local con muchos años de tradición en Granada, buen servicio y buena comida, alcachofas deliciosas; mejor la carne que el pescado.

Este lugar era fantástico. Lo encontramos por accidente mientras caminábamos hacia nuestro hotel en el barrio del Albaycín y lo reservamos por capricho. Fue la mejor idea que tuvimos. Sin pretensiones desde el exterior, om e dentro se ve un hermoso patio con una fuente en su centro, y música suave sonando en todo. El när era uno de los favoritos, con bebidas de todos los colores todas ordenadas por color para crear una vitalidad. Se siente romántico para mí, que era ideal desde que traje a mi esposa. Su comida era deliciosa, muy bien presentada, y daba de un aire de buena comida, que era un toque encantador para nuestra noche final en Granada. Pedimos un entrante para compartir, los Betenjeles con miel favoritos de mi esposa, que eran perfectos para compartir y convirtieron lo que considero una verdura muy mediocre en algo agradable que de hecho volvería a comer. Si los fans reales de calabacines perduran será mucho más feliz que yo. Para el principal, ambos obtuvimos el filete más tierno y sabroso con una mantequilla de romero intensa y el mejor puré que mi esposa había probado. Era celestial. Inicialmente habíamos planeado simplemente hacer mains e ir a explorar más de Granada, pero en la fuerza de lo bueno hasta ahora decidimos ir por dos postres también. La mía era una fruta de la pasión celestial y nimiedad de mango. Fue encantador. El servicio era muy atento, tenían la cantidad correcta de personalidad divertida sin tratar de estar en la cima, y gente muy agradable. Nos dieron una pequeña bebida para terminar que era precioso. En general, este lugar era excepcional, sin ser costoso. 3 platos, un poco de vino para mi esposa y varios refrescos cada uno corrió justo al norte de € 80 que valió la pena fácilmente. Me encantaría ir de nuevo.