Parador de Alarcon en Alarcón

Tuvimos una estancia de varios días en el Parador en septiembre de 2024. Es un hotel excepcional en una ubicación excepcional con un número inesperado de oportunidades de senderismo en la zona. Incluso el acceso por la única carretera pequeña es sorprendente. Una experiencia inolvidable con maravillosos amaneceres y atardeceres. Camas muy cómodas (tiene muy pocas habitaciones), buen servicio y cocina sabrosa.

Cenamos en el restaurante. Todo muy bueno con muy buen trato del personal. Muy recomendable el canelón de calabacín y el helado de queso.

La habitación tenía el espacio justo. Muy cómoda. El personal es amabilísimo. El castillo en el que está ubicado es impresionante.

Excelente y encantador Parador de Turismo a las orillas del Río Júcar que cuenta con unas vistas privilegiadas. El Parador está ubicado en el castillo de Alarcón, fortaleza con más de 13 siglos de historia que le da al parador un ambiente medieval muy atractivo. Muy bien conservado. Las dependencias están reconstruidas y adaptadas a las necesidades de un hotel, mezclando acertadamente el estilo moderno y clásico. Como es habitual en Paradores, ofrece en su restaurante cocina tradicional de la zona, en este caso, cocina tradicional manchega con platos típicos entre otros. El desayuno bastante bien, el línea con otros paradores. Debido al tamaño del castillo, no cuenta con muchas habitaciones y es difícil conseguir habitación, especialmente en las que están ubicadas en la torre del homenaje que son las más bonitas. El personal, tanto del hotel como del restaurante, fue en todo momento muy amable y atento. Muy buen servicio. No tiene parking interior y el estacionamiento de los vehículos se realiza en una zona de aparcamiento al aire libre en el exterior del castillo. El entorno también contribuye a resaltar el ambiente medieval del parador. El pueblo de Alarcón es una pequeña villa medieval declarada Conjunto Histórico Artístico muy bien conservado. Ideal para pasear por sus calles y visitar sus monumentos. Merece la pena.

🏯 Uno de los Paradores que más me ha gustado. Se trata de un castillo morisco del siglo VIII con una ubicación muy privilegiada y por ende, brinda vistas geniales. Es pequeño (el más pequeño de España) con tan solo 14 habitaciones pero super acogedor y con mucho encanto ⚔️ Las habitaciones son acogedoras, la cama muy cómoda para descansar bien. Todo lo que necesites - TV, escritorio, calefacción, caja fuerte etc. 🍴La cafetería y restaurante ofrece un trato excelente y cenamos de maravilla, con buen producto como la ensalada de perdiz, solomillo o paletilla de cordero. 🍳 El desayuno NO es un uno estilo buffet sino tiene una parte donde puedas coger panes y dulces pero luego es como brunch con una bandeja de embutidos y quesos, otra con tomate, guacamole, yogur y fruta. Además puedes pedir comida caliente como huevos revueltos, super contundente! Por último, el pueblo de Alarcón es de cuento con gente local muy abierta y muy simpática - hay varios puntos de interés, murales, algunas tiendas (pero no hay ningún supermercado) bares y restaurantes y sobre todo, miradores. Una estancia genial 🤩

Pasamos la noche del 27 al 28 de octubre en la suite, todo muy bien, pero por la mañana nos despertamos con estas vistas de cuento.

Una estancia en un castillo, hotel pequeño pero muy cuidado en un entorno de lujo. La recepción podría actualizarse un poco, pero ya sabemos lo que pasa con Paradores y las empresas públicas. La habitación parecía de un cuento de hadas.

Un verdadero favorito, ¡teníamos la habitación en el 3er piso de la torre! ¡¡Guau!! Todo está pensado para ofrecernos una estancia perfecta, es muy cómodo, insonorizado, el baño de lujo. Probamos el restaurante para cenar y ¡estaba delicioso! El desayuno también es perfecto, nos traen una tabla con muchos productos frescos (yogur, tomate, zumo, café, bollería, tarta, queso, fruta, y podemos añadir cualquier cosa de la carta sin pagar. Hemos pedido huevo y bacon). además de todo lo que ofrecieron y fue perfecto. Los empleados del hotel son todos muy amables. Nos prestaron la llave para acceder al camino de guardia del castillo, estuvimos allí al atardecer, ¡fue mágico! ¡Qué gran experiencia! ¡Para hacer al menos una vez en la vida! Muy buena relación calidad-precio Aparcamos nuestro coche en el aparcamiento público gratuito al lado del castillo, fue muy conveniente.

El lugar es fabuloso y el servicio excelente. Las habitaciones podrían ser algo más amplias. La comida del restaurante fenomenal

Precioso parador, ubicado en un lugar privilegiado , una joya histórica con todas las comodidades a tu alcance, personal muy profesional, sin duda un parador para vivirlo