OVO (Lopesan Villa del Conde Resort & Thalasso) en San Bartolomé de Tirajana

Fue una experiencia maravillosa, excelente comida, excelente servicio, de otra manera recomendaré este lugar para una visita.

Absolutamente fantástico. Mi pareja lo reservó para mi cumpleaños y no pudo haber elegido mejor.

El hotel es precioso y está situado junto al mar, a pocos pasos de la playa. Cuenta con varias piscinas para disfrutar y es muy práctico para desplazarse. Hay espectáculos geniales todas las noches y una gran variedad de restaurantes. Puedes pasear por la playa todo el día y disfrutar del buen tiempo.

Pasamos 8 días en este encantador hotel. Ubicación: La ubicación es preciosa, justo en el paseo marítimo y lejos de los altos bloques hoteleros de Meloneras. Aun así, está a poca distancia de la playa. El hotel consta de varios edificios, de no más de cuatro plantas, que albergan las habitaciones. Entre ellos hay zonas verdes, palmeras y tumbonas. A poca distancia, hay un supermercado exprés, restaurantes y un pequeño centro comercial. El hotel está distribuido en círculo alrededor de varias piscinas y un vestíbulo muy atractivo. Todo estaba muy limpio y se limpiaba con regularidad. Habitaciones: Teníamos una habitación estándar. Era muy espaciosa y estaba equipada con todo lo necesario: albornoz, secador de pelo, zapatillas, toallas de baño, hervidor de agua, minibar, almohadas adicionales, etc. Hay un vestidor, un baño con ducha y bañera, bidé y un balcón o terraza con mesa y sillas. Como ya han mencionado otros, no hay suficientes enchufes, y sin duda es así. Ya se ha mencionado la falta de enchufes, y efectivamente es así. ... Lamentablemente, las paredes son muy finas y se oye la alarma vibratoria de la habitación contigua. Las habitaciones están distribuidas alrededor de la piscina y tienen vistas a la piscina, vistas parciales al mar, al mar o a la calle. La nuestra daba al putting green 😊 y era muy tranquila. Creo que las habitaciones que dan a la piscina pueden ser muy ruidosas en verano. Ahora, en invierno, fuera de temporada, casi sin niños y con pocos bañistas (hace demasiado frío), era muy tranquila. Lamentablemente, solo te dan dos botellas de agua una vez (a menos que reserves el paquete Unique), lo cual es una verdadera lástima para un resort de 5 estrellas en un país cálido. El minibar también está vacío a la llegada y ni siquiera tiene agua para comprar. Comida: Reservamos media pensión, y tanto el desayuno como la cena fueron excelentes. La cena se sirve de 7:00 a 10:30 y de 18:00 a 21:30. Para desayunar, hay dos estaciones donde se preparan huevos frescos o platos con huevo. Por lo demás, siempre hay legumbres, tortillas variadas, muesli, ensaladas, fruta, jamón, queso, bollería, panecillos, pan, yogur, mermelada, pescado, zumos, batidos, frutos secos, frutos secos y mucho más. Hay mucha variedad, pero por desgracia, siempre es lo mismo, sobre todo con la fruta. Hay muy poca variedad; había uvas y maracuyá de vez en cuando, pero solo una o dos veces en ocho días. Por la noche, hay dos estaciones de cocina a la vista con carne y pescado, y una gran variedad de platos calientes. Siempre hay pizza y pasta variada, siempre algún tipo de paella, además de ensaladas, queso, postres variados, fruta, helados, sopas, encurtidos y una sección especial con platos rotativos. Supuestamente, había noches temáticas; La información estaba publicada fuera del comedor, por ejemplo, noche de tapas o noche de mariscos. Pero, sinceramente, podrían haberse ahorrado el problema, ya que las noches no estaban claramente señalizadas. Por ejemplo, en la noche de tapas, había sushi, pero no albóndigas, croquetas de jamón ni champiñones; básicamente, todas las tapas disponibles fuera del hotel. Siempre era más bien una mezcla de todo. Si vas a organizar noches temáticas, asegúrate de que realmente lo sean. Como ya se ha mencionado, el etiquetado es inadecuado. Aunque a veces está, suele ser incorrecto y a menudo no aparece, sobre todo en los postres. No me preocupan los alérgenos, pero cuando pides un plato combinado, ya sea frío o caliente, sería útil saber si contiene conejo, ternera, frutos secos, mazapán o algo similar. Servicio: El servicio, desde la recepción hasta el personal del restaurante, el personal de limpieza y el socorrista de la piscina, fue muy amable y servicial. Entretenimiento: Se ofreció discretamente, pero como no participamos, no puedo opinar al respecto. Zona de spa: No la usamos porque los precios nos parecieron bastante caros, pero se veía muy bien desde fuera. La piscina climatizada probablemente también esté en la zona de pago, así que, lamentablemente, no es de fácil acceso.

El hotel está construido como un pueblo español, con un diseño precioso y gran atención al detalle. La recepción es especialmente impresionante, diseñada como un gran salón de iglesia, lo que crea una auténtica sensación al llegar. El buffet es delicioso, se repone constantemente y también ofrece especialidades españolas, lo que realza la experiencia culinaria. Las tumbonas de la piscina a veces están bastante juntas, pero algunas ofrecen una magnífica vista del mar y la puesta de sol. Los jardines están muy bien cuidados, con un paisajismo precioso, y se nota en todas partes el esmero que se dedica a su mantenimiento. El personal es amable y servicial. El spa y las piscinas también tienen un diseño muy cuidado. En resumen, un lugar estupendo para relajarse en el paseo marítimo de Maspalomas.

Hotel muy bonito, es como una catedral.

Mi prometida y yo lo pasamos de maravilla en Villa Del Conde cuando la visitamos en noviembre de este año. Gran parte del mérito es de Stephanie, una empleada del restaurante de desayuno y cena. Fue muy atenta con mi alergia al gluten y siempre se aseguró de que tuviera un desayuno y una cena preparados por separado, algo muy importante para mí como celíaca.

Un hotel precioso, pero solo estuve viéndolo por fuera no estuve hospedada

Ventajas: Habitaciones amplias, muchas tumbonas disponibles. Gimnasio decente. Buenas camas en la habitación. Spa excelente. Inconvenientes: La almohada es demasiado dura. Pedí que la cambiaran, pero no hubo diferencia. Las tumbonas son durísimas. ¡Hay que pedir té, etc., por la app! ¡Con 24 horas de antelación! No hay opción de café. Para colmo, alguien cargó su almuerzo a mi habitación. ¿Cómo pudo pasar eso? El personal de recepción lo solucionó.

La atención de Fernando, realmente excelente, da gusto ver que todavía existe este tipo de profesionalidad. La experiencia gastronomía Maravillosa, las croquetas de carabinero magníficas, al igual que el pulpo a la brasa en puré de curry. De segundos pedimos la presa ibérica y el carré de cordero, todo delicioso y mimado. Los postres de otra galaxia, merienda canaria y chocolatte, sensacionales. Gracias por la experiencia, gracias Fernando