Orígens restaurant en Deltebre

Estuvimos por la zona y no queriamos irnos sin probar la paella de pulpo, y fue todo un acierto, no sólo la comida, también el restaurante y su personal.

Sitios únicos e idílicos, no muchos los lugares donde puedes comer a la vera de un río. Nos encantó la experiencia en su totalidad por la comida, por el servido y por el lugar, dentro es hermoso pero fuera es maravilloso.

La comida está genial está todo buenísimo la verdad que el ambiente en el comedor se está bien, hay aire acondicionado y ventiladores pero no molesta, una pega que hemos encontrado, esque una mesa de 5 personas preguntando al camarero nos diga que los arroces mínimo son para dos personas que lo vemos genial son 4 que quieren arroz y uno que no le gusta el arroz, a la hora de pedir 2 querían un tipo de arroz y 2 querían otro tipo y nos dicen que no lo pueden hacer que si pedimos arroz tiene que ser las 4 iguales que no pueden hacer dos tipos de arroz diferente que es de 5 personas, entonces si vienen 2 personas no le vas hacer una paella para 2? Y luego ojo las sillas de madera del comedor el respaldo se desmonta. Recomiendo el Magret de pato está espectacular. Hay que hacer reserva, y está adaptado para sill de ruedas

Sitio espectacular al lado del rio, comoda buenisima con raciones perfectas muy recomendable por no olvidar os del serviciobque ha sido excelente

Simplemente excepcional. Ese arroz no se come en ningún sitio. Y la torrija de postre exquisita. Servicio rápido y muy profesional. Felicidades!! Esa gente sabe lo que hace.

Muy buen arroz y entrantes abundantes. El local esta decorado muy bonito. Si podéis reservad afuera, al lado del Ebro, precioso. Amplio parking y bien señalizada la llegada.

Muchísima calor asfixiante y el servicio muy muy lento. La comida estaba bien, correcta, con producto excelente de la zona.

El mejor arroz que he probado!!! (Tan rico que volví al día siguiente 😋😋) los baños súper equipados top

Fuimos a comer, hace meses que lo teniamos en la lista de restaurantes a los que visitar, y un 10! Sitio precioso, comida muy buena, con su toque diferente y de calidad. Volveremos!

Llegamos por casualidad y volveremos por voluntad. En primer lugar quiero manifestar qué veníamos con un perro y fue perfectamente admitido. A su vez entiendo que los perros deben estar bien educados y no ladrar. A mí me molestan los perros que ladran en restaurantes y siempre los he tenido a mi lado. Fui atendido en catalán sin ningún problema por todo el servicio. Indico esto por las críticas negativas anteriores que he visto. Pero lo importante es que hemos comido muy bien, con un socarrat de pato excelente croquetas excepcionales y demás muy bien. Precio adecuado a la calidad que es superior. Vale la pena.