14/12/2024: Exquisito lugar para comer. Todo de 15, el servicio muy amable y pendiente de que estuvieses atendido,; comimos un arroz caldoso con distintos mariscos de una calidad excelente; recomiendo miren su variada y rica carta de vinos
08/12/2024: El restaurante se encuentra en una calle a la entrada del puerto deportivo, accediendo a él a través de una rampa o de escaleras (está a pie de calle, pero elevado, como una entreplanta).
Dentro la decoración es muy agradable, el comedor no es muy grande, alargado, no sé, 12-15 mesas quizás...pero cuando traspasas el mismo en dirección a los baños continúas y acceder a un patio maravilloso que duplica el aforo (es un patio amplio, cubierto con unas lonas -ignoro si serán suficientes en caso de lluvia, sí para proteger estupendamente del sol- muy bien acondicionado).
Sorprendidos por lo bien organizado que está el restaurante, multitud de camareros moviéndose ágilmente, muy bien compenetrados, sin aturullamientos, bien comunicados. Nos atendieron enseguida, muy amables y nos ofrecieron un menú de fin de semana que no incluía la bebida. Pero un menú curioso, en el que el primer plato no lo eliges, sino que te ponen al centro tres tipos de platos (gambusinos, brie rebozado con mermelada de arándanos, y unos calamares (no a la romana, no las típicas anillas, sino trozos de calamar con un rebozado tenue, muy rico). Sin ser muy abundante, nos parecieron razones muy razonables. De segundo optamos por un arroz a banda (había gallo, que tenía muy buena pinta y entrecot). LLegó el arroz, recién hecho en su paella, nada de raciones de paellera grande a compartir con otros, sino una paellera para nosotros dos, hecha exprofeso. Estaba bastante bueno, muy recomendable, eso sí, algo escaso de arroz, como últimamente me ocurre en el resto de restaurantes que he frecuentado en la comunidad valenciana.
Y de postre elegimos la tarta de queso y la tarta de piña. La de queso tenía la apariencia de un flan de queso, pero no, era tarta "casera", muy rica, pero no de las mejores que he probado (aunque no dejé ni el aire que la rozaba). La tarta de piña sorprendentemente buena (era la primera vez que probábamos eso), una especie de puding cremoso con trocitos de piña natural, muy, muy rico.
En fin, casi 30 euros por persona con el café, (la bebida no entra en el menú), pero muy satisfechos porque todo el servicio se realizó con gran profesionalidad y amabilidad por parte de todos los camareros y el menú tenía una relación calidad-precio muy alta.
Repetiría sin duda