Venimos a cenar el fin de semana pasado. Francamente no entiendo cómo este local puede estar solamente medio lleno un sábado por la noche con el espacio tan bonito que tiene y con la deliciosa carta que sirve. Vengo cada año en periodo de fiestas y siempre pasa lo mismo.
Es cierto que me hubiese gustado saber cuando llamé que no tenía derecho al menú degustación, pues sólo se sirve con reserva previa, pero ha sido fallo nuestro por no habernos informado antes y por haber llamado media hora antes para ver si tenían mesa para las 21h (el menú degustación es la opción que solemos pedir en los restaurantes que lo proponen).
No obstante, no me arrepiento de haber venido, y seguiré viniendo.
Me pareció que el jurel estaba cortado un poco grueso y con bastante antelación, pero igualmente estaba muy bueno.
Las croquetas llevaban un rebozado perfecto, bien fino y crujiente, se agradece mucho, por muy estandarizado que esté este plato.
La lubina estaba deliciosa, y el jugo de callos me pareció un plus, pero el solomillo, incluida la guarnición, fue de 11!
El servicio es lo que más destacaría de la noche. Se agradece, y mucho, tanta amabilidad sabiamente mezclada con el profesionalismo, sin caer en la pedantería. Al mismo tiempo se siente la suficiente intimidad en la mesa. Igualmente once sobre diez, sin duda, y más en los tiempos que corren.
Lo único que pudo ser un poco incómodo fue el ambiente y de ahí mi puntuación. El aire (bastante fuerte) que pasaba hacía bastante ruido entre las rendijas de las enormes puertas correderas de vidrio que tiene la sala y dio un momento que teníamos un poco de frío.
Es un lugar muy recomendable que insisto, no entiendo cómo puede no llenarse un sábado por la noche. Si fuere una cuestión de precio, la proposición del arroz me parece muy económica para una cena de dos. La torrija, además de estar deliciosa, tiene un precio más que correcto para la talla que tiene. La carta de vinos está muy bien, aunque ciertamente se agradecería que pusieran el servicio por vaso, que en principio no figura en carta.
Gracias por la velada y hasta pronto!
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