O Muiño Do Chirlo en Celanova

Excelente carta gastronomica,magnífica atencion en un ambiente rodeado de una naturaleza exquisita 👍.. 100 % recomendado

Buenas comida,en un lugar exquisito para para poder disfrutarla.

Estábamos pasando el fin de semana por la zona y hemos decidido reservar mesa en este restaurante para cenar. Fue una gran elección. La estupenda cocina y el entorno espectacular unidos al maravilloso servicio que nos ofreció María, hicieron que disfrutaramos de una cena perfecta. El único punto negativo que se lleva es porque en el aparcamiento hay cero iluminación, ni pública ni del establecimiento (volvimos al coche gracias a la linterna del móvil) y el acceso desde el aparcamiento hasta el restaurante también tiene una iluminación tremendamente escasa

Lugar muy bonito. La comida espectacular. El unico pero es la nula iluminacion en el parking y la poca iluminacion en la terraza exterior. Por lo demas todo super

El sitio es espectacular, pero la comida no vale lo que piden.

Ideal para recargar pilas y tomarse algo tranquilo.

El restaurante está ubicado en plena naturaleza, pegado a un río, la ubicacion es preciosa, incluso los días más calurosos hace muy buena temperatura, tienen mesas en el exterior y interior, en caso que te apetezca comer en el exterior es aconsejable llamar casi con una semana de antelación. La atención genial. Nosotros comimos zamburiñas y chuletón de ternera, y estaba todo perfecto, sin duda repetiremos.

Un restaurante muy bello, comida ,servicio y ambiente excelente y unos paisajes maravillosos

Comemos siete personas el domingo. Nos sentaron en la zona exterior al lado del río y a pesar de ser un día extremadamente caluroso se puede estar medianamente aceptable. Pedimos varios platos que estaban fuera de carta que van cambiando de cada vez . De entrante pedimos una ensalada de tomate Burrata y jamón, queso a lo pobre, zamburiñas y pulpo. A excepción del pulpo que estaba duro el resto estaba muy bueno. De segundo, cada persona pidió un plato entre ellos: cabrito asado al horno, que la persona que lo comió dijo que estaba un poco seco. Lagarto de cerdo, que la persona que lo comió dijo que estaba bueno. Milanesa de pollo, que los que lo comieron dijeron que estaba bueno y que el rebozado estaba bien. Carrilleras de cerdo, que por opinión propia no me gustaron mucho ya que estaban un poco Chiclosa pero es una opinión a lo mejor otra persona le gusta la textura. Revuelto a la riojana, plato fresco. De postre destacar la tarta de Ferrero, que aunque la elección para un día de casi 40° era una bomba estaba muy buena.

Sitio encantador, antiguo molino restaurado conservando su esencia. Fuimos en un día de calor extenuante y fue maravilloso comer al fresco , al lado del rio. La comida muy correcta y el servicio de 10. Muy recomendable