Miramar en Tarifa

Visitar el Restaurante Miramar es una experiencia que merece ser repetida. Situado en un paraje espectacular, frente a la playa de Bolonia y con vistas a las ruinas de Baelo Claudia, este rincón combina la mejor gastronomía local con un entorno natural único. La comida es simplemente excelente. El atún encebollado, el arroz negro o las tortillitas de camarones son auténticas joyas del paladar, elaboradas con producto fresco y sabor a Cádiz. Todo lo que sale de su cocina tiene el sabor del mar y la tradición andaluza. El servicio merece una mención especial: los trabajadores son amables, rápidos y siempre atentos. Se nota que disfrutan lo que hacen y se desviven por atender bien. Con su trato cercano y su profesionalidad, consiguen que te sientas como en casa desde el primer momento. El local es amplio, luminoso, con grandes ventanales y una terraza con vistas privilegiadas. Ideal para una comida relajada después de la playa o una escapada gastronómica en pareja o con amigos. Un sitio de los que se recuerdan. Mi nota es clara: 10 sobre 10. Volveré sin duda.

Experiencia genial! El camarero que más nos atendió (Javi) nos ofreció un servicio espectacular, combinado amabilidad, con humor, profesionalidad y cercanía. Ojalá encontrar más profesionales así. La comida fue una experiencia igual de buena, combinando productos locales muy sabrosos con platos originales y de mucha calidad. Además pudimos estar con nuestro perro en la terraza. Sensacional!!!!

Gran servicio, gran comida,fuimos atendidos en menos de 10 minutos en hora punta y el camarero Javi fue un máquina brindándonos un gran servicio, gracias Javi

Las 5 estrellas os las doy gracias a vuestro camarero Javi, sin el el restaurante no funciona.

Solo por ver las vistas ya merece la pena: al frente el mar, más azul imposible, al costado las ruinas de Baelo Claudia. Restaurante bonito, con cocina sabrosa y productos muy frescos, desde el atún hasta las ensaladas. De lo que pedimos, todo exquisito, excepto las puntillas que tenian un rebozado grueso. Postres buenisimos caseros. Hay que reservar mesa con tiempo. Disfrutarán los de buen paladar.

Nos encontrábamos en Tarifa cuando reservamos a las 15:30 y nos atendieron sin problema, llegamos a las 16:15, un servicio de 10 donde nos recomendaron los platos de Atún, pedimos albondigones y gallo frito, espectacular, y para los nenes hamburguesas de Riotinto, muy ricas también. Merece mucho la pena, ubicación espectacular junto a los restos arqueológicos, las dunas y playa de Bolonia. El acceso, recomiendo dejar el auto en los parkings disuasorios y acceder a por el tramo hasta el restaurante.

Todo el personal muy atento y amable, la comida muy rica y las vistas espectaculares. ¡Volveremos seguro!

Excelente trato en un lugar estratégico. Frente a la Duna de Bolonia aire de mar y comida exquisita. Albóndigas de choco espectaculares.

no he comido Pero el personal es muy servicial y agradable.

Un sitio excepcional en un enclave excepcional, pero lo mejor de todo estaba por llegar: el personal es encantador a la vez que profesional. Da gusto encontrar a gente a la que le gusta su trabajo. Muchas gracias