Millennium Restaurant en Sant Just Desvern

Hotel muy confortable, en el centro. Limpio y de fácil acceso, tiene un buen desayuno.

Habitación con muy mala iluminación, no tenía luz en el cabecero de la cama solo la luz de entrada a la habitación, y no es porque estuvieran fundidas es que no había, limpieza normal, cama muy muy dura, sin escritorio para poder trabajar, ya que viajo por negocio y suelo aprovechar la habitación para seguir trabajando , hay muchas cosas que pueden mejorar sin mucha inversión solo un poco de cariño

El joven encargado del restaurante por la noche nos atendió de maravilla, total cortesia

Amplió y buen servicio con despertador

Habitación amplia y limpia. Accesorios en baño, secador y bañera con ducha. Nevera y pestillo en puerta de entrada a la habitación. Buena atención. Lugar tranquilo. Cerca de transporte, restauración y supermercados.

Necesita algunas mejoras. El servicio de recepción está bien con las chicas, el chico que estaba durante las dos noches que estuve, no se le ve muy animado en el trabajo y le falta un poco de simpatía con los clientes. Por lo demás bien. Los desayunos correctos.

Ha faltado gel y champú desde el primer día y cuando lo pedía en recepción, no había o te daban pastillas de jabón. No hay otra cosa. En el restaurante o bajabas a las 07:00 y haces fila con los "guiris" o ya te quedabas sin nada, porque no dan a basto una sola persona.

El hotel está bien, pero no está acorde con las 4 estrellas que tiene, creemos que está por debajo. La comida de la cena de finde Año estuvo bien, buena, cantidad suficiente, aunque un poco fría. El servicio perfecto, muy atento y servicial. Lástima los churros que nos dieron en la madrugada que eran los que te puedes hacer en casa, y no valían mucho, a nosotros personalmente no nos gustaron y el chocolate tampoco. Las señoritas de Recepción bastante antipáticas, no cuesta tanto tener una cara más alegre, ya me imagino que no será grato trabajar ni el 31 ni el 1, pero las cosas se tienen que tomar de otra manera! El disjokey nos gustó mucho, hasta cantó alguna canción!! Y un 10 para el barman José Luis, muy atento y amable, acababa su jornada y tuvo el detalle de venir a nuestra mesa a despedirse.

Buen hotel donde poder descansar y recargar pilas , muy tranquilo y acogedor

La habitación escaseaba de más mobiliario, cómo otra silla para sentarse,,,,, al baño le falta una reforma ,la grifería muy vieja, la cama estaba bien, grande y cómoda. La comida del desayuno está bien y el café bueno. Creo que hay escasez de personal, los que vimos eran amables y correctos.