Mesón O Pozo en Narón

Un lugar estupendo para ir a tomar algo. Su carta no es muy extensa pero más que suficiente para todos los gustos. Todo lo que sirven está estupendo, producto de calidad y bien cocinado. El lugar es muy bonito y acogedor, aunque en invierno abajo se pasa bastante frío, mejor reservar arriba. El personal es bastante atento. Edito! Lamentablemente tengo que bajar la puntuación, las dos últimas veces se notó bastante la bajada de calidad y servicio.

Fuimos a cenar 2 parejas. Nos trataron genial y la comida estuvo buenísima. La ración de pulpo muy abundante y el entrecot de gran calidad.

Visitado el 9 / 8 2025. Creo que es el típico mesón , con paredes de piedra y vigas vistas bien conservados. Tiene una terraza esterior en parte cubierta, Tuvimos que esperar un poco al ir sin reserva. Pero mereció o pena. El personal muy amable y atento , trato muy cercano. buenas carnes y muy bien hechas , un cachopo que en nada tiene que envidiar a los leoneses o asturianos . Chipirones en su perfecto punto. Como los postres también estaban perfectos y generosos . enhorabuena a todo el personal desde la cocina , hasta la camarera que nos atendió. gracias .

Un lugar muy acogedor donde comer de 10. El salpicón, la picaña y el abanico.. ¡espectaculares! El dueño nos atendió y un10 el servicio, repetiré sin dudar

Muy buenas las zamburiñas, pero mejores (si cabe) los chocos!

Buen servicio y atención al cliente. Trato familiar. Comida excelente. Los postres caseros bueniiiisimos!!!! Volveremos!!!

Comimos boquerones fritos y carrillera de cerdo con patatas. De postre re queso con miel y para beber una cerveza. Precio 14 euros. La atención inmejorable, el lugar acogedor y la comida riquísima. Totalmente recomendable.

Muy buena comida y atención. El cachopo estaba espectacular, al igual que el pulpo.

Muy buena atención y muy buena comida.

Totalmente recomendable. Hemos ido a comer despues de nuestra primera etapa del camino de Santiago Inglés y sin duda ha siso todo un acierto. Comida excelente, lugar tranquilo y el trato inmejorable