Meson El Lagar De Montejos en Ponferrada

Un restaurante con mucho encanto, muy buen servicio y comida excelente. Disfrutamos de una comida y sobremesa muuy agradable.

Los garbanzos con langostinos estupendos con un huevo frito El lagar bonito

Lugar acogedor con un ambiente rústico precioso, ideal para sentir el calor de hogar de una casita de madera ahora que en otoño e invierno hace frío. La comida casera, tan bien elaborada, guisada, y preparada con una materia prima de gran calidad hacen que sea una experiencia muy agradable. Haced caso a la recomendación de los platos que os haga el camarero porque acierta siempre, aunque la verdad, es imposible fallar. Debo decir, que los guisos y estofados son una maravilla. He ido, me ha encantado, volveré y seguiré repitiendo ¡seguro! Muchísimas gracias por todo

En San Andrés de Montejos, a 5 minutos de Ponferrada, el Mesón El Lagar nos transporta a la autenticidad de la comarca a través de una experiencia gastronómica memorable. El restaurante debe su nombre a una imponente viga rústica que preside el comedor, testimonio silencioso del antiguo lagar familiar, estableciendo así un vínculo tangible con la rica historia vitivinícola de la región. La propuesta culinaria es un equilibro perfecto entre tradición e innovación: cocina casera que respeta los sabores auténticos del Bierzo con un toque moderno que la actualiza sin desvirtuarla. Esta filosofía se refleja tanto en la ejecución de los platos como en su presentación, siempre cuidada pero sin artificios innecesarios. El ambiente rústico del local, con sus paredes de piedra y el lagar tradicional, crea un marco único para disfrutar de la gastronomía local. Sin embargo, lo que verdaderamente distingue al Mesón El Lagar es la calidez de su servicio, ese trato cercano que te hace sentir como en casa desde el primer momento. La carta de vinos merece mención especial: una cuidada selección que permite a los comensales explorar la riqueza vinícola del Bierzo a través de referencias tanto conocidas como de pequeños productores locales. En definitiva, el Mesón El Lagar representa la perfecta conjugación de historia, tradición y modernidad, ofreciendo una experiencia que va más allá de la mera comida: es una inmersión en la cultura y hospitalidad bercianas. Puntos destacados: Ambiente auténtico con historia vinícola Cocina tradicional con toques modernos Excelente carta de vinos del Bierzo Servicio cercano y acogedor Ubicación perfecta para explorar la región

Calidad precio muy bueno. Trato excelente, comida casera muy rica, buena materia prima, elaboración perfecta y te recomiendan muy bien incluso las cantidades.

Es una sorpresa encontrar en un pequeño pueblo berciano y bastante escondido, este agradable restaurante que sin embargo, lleva casi 40 años en activo. En verano se puede comer en la terraza bajo la parra y cuando hace más frío, en la parte de dentro bajo la auténtica viga del lagar. El servicio es muy atento y la comida de proximidad y muy bien elaborada.

Puedo comenzar recomendándote este sitio pero no hace falta que lo haga, una imagen vale más que mil palabras y no tengo de estas para describir lo impresionante que es todo lo que sale de su cocina, desde la atención al llegar al sitio, la comodidad del lugar, su originalidad y su café, nosotros pedimos de primero para compartir (3 personas) mollejas de ternera y croquetas y son las mejores mollejas que hemos probado en nuestra vida los tres a parte de que las croquetas tienen uno de los rebozados más originales que hemos probado, la lubina era de pesca fresca y de lo más jugosa que se puede pedir. Las gambas con mejillones a parte de estar bien cocinados tiene una salsa exquisita que te acaba dejando ganas de limpiar el plato con un trozo de pan “de pueblo” ( de los más ricos) como los garbanzos con gambas y huevo que están como todo en el punto perfecto de sal especias y aún te deja sitio para un exquisito postre, un tiramisú de una consistencia cremosa y espumosa de lo más deliciosa. Hablando de los otros dos postres he de decir que añadir esta tradición de poner las castañas es mi nueva pasión, pues la tradición del Bierzo y sus castañas la comes en este postre de limón y la tarta de queso es lo más rico y espumoso y suave que yo he probado en esta zona en la que me dedico a probar todos los postres, especialmente las tartas de queso. 1 (mal)- 10(excelente) Punto de sal: 10 Sabor: 10 Originalidad: 8 porque es en parte tradicional Frescor de los productos: 10 Texturas:10 Atención: 10 Relación calidad precio: 10 Por nuestra parte queda 100% recomendado como parada obligatoria en el Bierzo.

Gratísima experiencia tras llegar, casi por casualidad, al ir de viaje y no querer alejarnos mucho de la autovía. Siendo agosto, comimos en una pequeña terraza exterior, muy agradable, cubierta por una parra, pero el interior es precioso. Nos recibieron con una degustación de salmorejo buenísimo. Queríamos compartir y nos dejamos recomendar, disfrutando de una excelente ensalada de canónigos sobre un carpaccio de piña natural con queso de rulo. Comimos además unos sorprendentes garbanzos con langostinos, huevo frito y pimentón, croquetas con jamón y un entrecot de ternera. Y de postre tarta de queso al horno y teja con helado de turrón. Todo exquisito, a un precio muy razonable y con una atención agradabilísima. Sin duda, un lugar para volver.

Excepcional. Local acogedor, bonita decoración y comida excelente y hecha con cariño. De primero ensalada de jamón de pato con fresas, estaba excepcional con un aliño muy rico. De segundo rabo de novillo guisado que se deshacía en la boca, buenísima, al igual que los chipirones, tiernos y sabrosos. De postre la teja con helado. La teja buenísima. Un diez!!

Excepcional. Local acogedor, bonita decoración y comida excelente y hecha con cariño. De primero ensalada de jamón de pato con fresas, estaba excepcional con un aliño muy rico. De segundo rabo de novillo guisado que se deshacía en la boca, buenísima, al igual que los chipirones, tiernos y sabrosos. De postre la teja con helado. La teja buenísima. Un diez!!