Mesa Del Conde en San Felices de los Gallegos

Gracias por el trato que nos brindaron. Excelente habitación y estupenda cena. No lo olvidaremos.

Comida riquísima: hemos probado la ensalada de bacalao, el rabo de toro y el bacalao con boletus. Todo muy bueno y gran servicio.

Habíamos estado unos meses antes comiendo en el restaurante y la comida nos encantó, así que, tras hacer una ruta por la zona, reservamos cuatro amigos para comer el pasado sábado. Sin embargo, se nos complicó el poder llegar a la hora que habíamos solicitado y llamamos para cambiar la reserva 45 minutos más tarde. Llegamos casi a las 4 de la tarde, pensando que ya no nos iban a atender, algo lógico porque la cocina tendría un horario de cierre y en el restaurante ya no quedaba ningún cliente. A pesar de que les dijimos que entenderíamos que no pudiéramos comer por el enorme retraso de nuestra llegada y que podríamos comer en algún otro lado, no nos dejaron marcharnos y nos atendieron con enorme paciencia y cariño. Nunca habíamos tenido tal atención en ningún otro restaurante. Estuvimos algo más de una hora degustando las exquisiteces de su menú, revueltos, ensaladas, rabo de toro (extraordinario), hamburguesas de morucha y los magníficos postres. La comida, de 10 pero el trato y su paciencia, de 20. Muchísimas gracias por vuestro cariño y dedicación al cliente. Volveremos seguro.

Hemos pasado un fin de semana en pareja espectacular. El mejor sitio para visitar Arribes

Tanto la atención como la comida es cum lauden. Gracias, repetiremos!

La comida buenísima, el precio es bueno y el trato excelente.

Fuimos a comer y la experiencia ha sido buena. Recomiendo el rabo de toro y los revueltos, estaban ricos. Pedimos también bacalao y cordero y no repetiría.

Estuvimos mi mujer y yo. Disfrutamos de una semana de tranquilidad, naturaleza, y pueblos históricos. La atención por parte de las propietarias del establecimiento, Clara y Milagros, fue exquisita. Altamente recomendable para pasar una temporada, alejada del bullicio de la ciudad, disfrutando plenamente del ritmo pausado de la localidad con sabor de antaño.