Matadero Asador en Ribeira

Muy buena atención, el camarero muy campechano las croquetas de cecina son excepcionales muy muy ricas la rubia gallega también muy buena y tierna. Muy buena experiencia gracias. A parte de la carta con variedad de platos tienen menú entre semana con comida casera.

Ya fui varias veces y no defrauda, si no que todavía sorprende. Todo de diez, la comida está buenísima, muy bien presentada y de calidad. La atención es muy buena también, los camareros son majísimos y el lugar es precioso. Un 10/10

Un muy buen sitio para tomar algo na buena carne….. lo encontramos de rebote y porque nos quedó muy lejos porque sería para repetir muy muy a menudo…. Encantadisimos…

Comimos estupendamente y muy bien servido.

Fuimos porq vimos en Google que tenía muy buenas reseñas. Y no me extraña. Llegamos un poco tarde y nos atendieron sin problema. La comida,espectacular,sobre todo el Bacalao.. Los camareros muy profesionales y rápidos. Sin duda,sí volvemos por esa zona,volveremos!!

Buen sitio para comer carnes, pero precio muy elevado. Carnes de calidad. Tarta de queso muy buena.

Fuimos a El Matadero en Ribeira y la experiencia fue de diez. Desde el primer momento Christian nos atendió de maravilla: se nota que sabe muchísimo de lo que hace y que lo transmite con cariño, explicando cada detalle y aconsejándonos de la mejor manera. Probamos distintas razas de vaca y buey —todos trabajados a partir de los 6 años y con maduración perfecta— y la verdad es que se notaba en el sabor. Las croquetas de buey y de cecina son un escándalo, el steak tartar buenísimo y la tarta de queso para rematar, de las mejores que he probado últimamente. También ofrecen carne a la piedra, que con las vistas impresionantes a las dunas de Corrubedo hace que la experiencia sea aún más especial. Un sitio totalmente recomendable para los que disfrutan de la buena carne y del trato cercano.

Fuimos a este asador y la experiencia ha sido excelente. Probamos unos pimientos del padrón deliciosos y un chuletón de frisona marela espectacular, acompañado por un vino llamado Camiño Real que maridaba de maravilla. Nos atendió Cristian, un camarero de 10: atento, cercano y siempre pendiente de cada detalle. Además, estuvimos en una sala con extractor y piedra en la mesa, perfecta para disfrutar del chuletón en su punto. Aah y un postre de tarta de queso y pistacho bruuuuutal. Sin duda, un lugar al que volveremos. ¡Muy recomendable!

Fuimos sin reserva y tuvimos suerte. Las zamburiñas, bacalao y calamar, todo muy bueno. Servicio atento y profesional. Sin duda, repetiremos

Una buena carne tierna y sabrosa la rubia gallega la tarta de queso espectacular 👌 Una gran experiencia para repetir