Manila en Zaragoza

Voy mucho días por la mañana al salir de trabajar y la verdad que es de agradecer que haya un bar con un horario tan extendido. Ademas de eso me suelo pedir el jamon batido y la tarta de queso y me atrevería a decir que son ambas los mejores que he probado en mi vida, además de eso si vas a la tarde o a eso de las 8 de la mañana tienes muy buenas tanto raciones como tapas espectaculares por acabar comentar el muy buenas precio que tienen para la gran calidad de todos los productos que ofrecen. Por lo demás comentar que el café también es de una muy altísima calidad. En cuanto al trato personal es inmejorable puesto que el jamón batido muchas veces al ver que a lo largo de la semana suelo ir me suele tener preparado Luis para poder tener y cuanto menos de agradecer dicho gesto. En definitiva si tenéis la oportunidad de ir a probar mi recomendación es que vayáis que seguro que os encantará como a mi

Muy buenas tapas ,muy buenos precios y aún mejor atención del personal. El único inconveniente es que parte de la terraza está al lado de contenedores de basura y de un mercado, con lo que, a veces, en verano, hay un tufillo....

Un bar de barrio que lleva ya muchos años funcionando. Las croquetas estupendas

Fenomenal!! Si pasas por el barrio de Las Delicias, tienes que ir!! Todo te va a gustar.

Yo no he estado en el lugar, lo único que estoy interesado en aprender la hostelería, ver si me pueden adiestrar 15 días,si les interesa como trabajo me puedo quedar con ustedes, estoy muy interesado en aprender, gracias

Tanto la chica y el chico de ésta tarde majísimos los dos. Educados y muy trabajadores. Me he tomado un café con leche calentito, y una tortilla de patatas como la que hacía mi madre. Estaba lloviendo mucho hoy, ha sido mi salvación ésta cafetería!!!!!!

He estado de paso para tomar un refresco y hacer una parada. No he comido nada. El mostrador lo tiene limpio y con unas tapas muy atractivas y todas bajo vitrina. Da muy buena impresión, volveré para degustar sus tapas.

A pesar de ser un clásico, no había estado nunca; el camarero que nos atendió no pudo ser más amable; las papas bravas buenas, no espectaculares pero muy apetecibles. La terraza estaba a tope lo que dice mucho de la calidad del sitio. Para volver