Mamaína Tapería Urbana en Dos Hermanas

100% recomendable, todo buenísimo, muy buen trato y servicio rápido Nos ha encantado 😃

No está mal. Me faltó probar su famosa tabla de quesos porque no tenían en ese momento y tuve que confirmarme con una tapa de queso viejo que estaba bastante bueno. Lo demás que probamos muy bueno. Por poner un pero diría que la cerveza no está todo lo fría que me gusta.

Fui por una publicidad en redes. No ha estado a la altura de lo comentado . Tapas originales , no especialmente bien resueltas. Lo mejor probablemente las croquetas. Tartar y bravas no me han enamorado

Comimos increíblemente bien en Mamaina. El arroz acabado en horno con presa ibérica y sobrasada estaba espectacular, con el punto perfecto y ese toque final del horno que lo hace único. Lo aconsejo muchísimo, es un plato que no decepciona. También probamos el canelón de espinacas, que venía con una bechamel de queso manchego en su punto: cremosa, sabrosa y nada pesada. Se nota el cariño y la calidad en cada plato.

En Mamaina se nota que la comida es natural desde el primer bocado. Probé los tacos de pavía y los huevos no rotos, y ambos platos me sorprendieron por su sabor casero y la calidad de los ingredientes. Los tacos están perfectamente sazonados, con un toque fresco que los hace muy ligeros, y los huevos no rotos son pura delicia: yema en su punto y clara con puntillita, una combinación de sabores que reconforta. Se agradece encontrar sitios donde se cuida tanto el producto y se cocina con mimo. ¡Repetiré sin duda!

Experiencia exquisita el servicio bueno y amable la comida estupenda a destacar la tarta de queso que está espectacular

Comimos de maravilla. Probamos muchas tapitas, y todas estaban muy ricas. Las que más nos gustaron fueron las alitas de pollo y el crujiente de carrillada, y ojo con las croquetas de caña de lomo que están super potentes de sabor y buenisimas!!!!

Bonito local y buen servicio. La comida nada del otro mundo y las raciones muchas patatas y poco contenido.

Descubrí Mamaína y fue todo un acierto. Por solo 13 euros, disfruté de un menú, creo que menú ejecutivo, con dos platos que bien podrían ser primeros, un postre casero y una bebida. Todo con ingredientes frescos y un sabor casero que se nota en cada bocado. Además, el ambiente es acogedor y el servicio, rápido y amable. Perfecto para comer bien sin gastar mucho. ¡Volveré sin duda!

Fuimos a cenar 3 amigos y pedimos 6 tapas para probar, estaba todo riquísimo y muy buenos precios. A mejorar las bravas que sabían bastante a patata cocida, pero la salsa muy rica. A mejorar también el parmentier de trufa, parecía puré de patata sin más. Lo que más nos gustó fue el provolone con pulled pork, el crujiente de carrillada y el coulant de chocolate. Volveremos sin duda!