Los Caracoles Viavélez en Gijón

Uno de los mejores sitios para comer en cimavilla!

Restaurante súper recomendable 🙃 buen producto atención muy buena. plato a probar bogavante ala menorquina no os defraudará

No está mal la comida. Tienes que acertar con los platos. Me gustaba más el ambiente informal de antes

Comida muy buena y elaborada, se nota la calidad ya conocida de viavelez. Servicio algo lento entre platos. Sidra de denominación espectacular. Para repetir

Buena atencion, y excelente producto. El bogavante frito (riquisimo y muy recomendable) me transportó un ratito a mis queridas Pitiusas.

Muy bueno todo. Comedor muy agradable

Hacia mucho tiempo que no visitaba los caracoles, tanto que desde el nuevo giro que han dado al local, hace ya tiempo, no había venido y es cierto que ha dejado de ser el bar de toda la vida y ahora ofrece comida mucho mas elaborada, eso sí, con las vistas de siempre. La comida bien, sobre todo los torreznos que además van bien presentados y en cantidad generosa. Buen servicio y precio razonable.

Una gran sorpresa. Una Magnifica elección. Un Restaurante para disfrutar hasta sin mesa. Fuimos sin Reserva, un Sabado de Partido, con todo a tope y Manuel( el dueño) nos ofreció la barra xa tomar unas raciones. Menudo festín que nos dimos. Desde el Tataki, pasando x los torreznos y continuando con los tacos de Pato y Lombarda. Todo lo q pidas es una gran elección. Sin olvidar la conversación!! Y los postres!!! Madre mia, muerte x Chocolate!! la Sidra de Castañon, una gran elección. Si no te quieres equivocar, en los Caracoles has de reservar. Volveré!!!

Lugar muy acogedor, Manuel muy amable y profesional, comida muy buena a destacar los calamares con la N'duja calabrese. Volveremos Claudio, Carmen y Lola.

Un sitio pequeño, tranquilo, con encanto, bien situado y con una excelente cocina. Comimos ensaladilla, aguacate con txangurro, calamares fritos y tacos de pato y lombarda: la ensaladilla muy rica, diferente a lo habitual; el aguacate con txangurro bueno; la ración de calamares mejorable, también me pareció muy justa de cantidad, lo más flojo sin duda; y los tacos excelentes, lo mejor de la comida. La tarta de queso de postre muy buena. Lo peor fueron los tiempos de espera: 25 minutos esperando por los tacos o 10 minutos por la tarta. Da la sensación de que no tienen mucho personal en cocina... una pena que el ritmo de salida de los platos no fuera más ágil.