Lobito de Mar en Marbella

Tercera vez que vamos pero esta última nos ha decepcionado. El servicio ha bajado bastante, la atención y los tiempos de espera. En cuanto a la calidad sigue siendo buena, pero no han variado la carta en al menos 4 años. Pedimos langosta y para el precio que tiene (150) faltaba fuera y sabor. Tardaron tanto en traernos los cokteles que parte de la comida la hicimos sin nada que beber, se los recordamos a 3 camareros diferentes.

M.A Gerente Avwerosuo Lucky X Oh, demonios, esta manifestación realmente está bloqueando la calle. ¿Sabes de alguna calle cercana que pueda tomar? Ya llego súper tarde, así que un atajo sería increíble.

Todo un festival para el paladar! Un "must" para quienes los fans de disfrutar de una buena comida. Aunque cuando uno va a un restaurante de un gran chef como lo es Dani, ya sabe que económicos no son estos lugares, aún así la relación calidad-precio me parece más que correcta. Personalmente me gusta un pelín más el de Madrid, pero eso ya va a gustos. Nos fuimos felices y con ganas de repetir :)

Decidimos escoger un sitio especial para cerrar el verano y escogimos algo especial y seguro. La carta es amplia y con gran variedad de platos de atún. El servicio estuvo muy bien, en cuanto a atención y recomendaciones. Los precios los esperados en un restaurante de chef y situado en la milla de oro de Marbella.

Hemos estado comiendo y ha estado todo buenísimo, y la atención de los camareros espectacular. Hemos pedido de entrantes la ensaladilla de gambas y croquetas de gambas y chipirones y estaban espectaculares. Luego de principales merluza en tacos fritos al limón, tortilla de bacalao terminada en mesa, chanquetes de bogavante con huevo frito y tartar trío de atún, todo estaba buenísimo pero destacaría el tartar trio y los chanquetes de bogavante que estaban BUENISIMOS. De postre el happy hippo y tarta de queso que estaban muy buenos Sin duda volvería a repetir

Sitio espectacular, buena comida.

La comida fue excepcional, sin duda una de las mejores que he probado en mucho tiempo, y el servicio en sí fue excelente durante toda la comida. Sin embargo, la experiencia se arruinó considerablemente cuando un miembro del personal nos dijo que teníamos que irnos en dos horas y sugirió que pidiéramos rápido. Tener tanta prisa causó una muy mala impresión, especialmente en un restaurante de esta calidad. Una comida excepcional merece un ambiente donde los comensales puedan disfrutarla sin sentirse presionados.

Al llegar, sugerimos un cambio de mesa por estar la nuestra en la Terraza y ser imposible comer a esas temperaturas... La solución fue darnos una mesa alta a pie de barra, cosa q no era lo esperado en un lugar de este nivel, pero q resultó agradable y con una oferta mayor al poder degustar "Tapas" exclusivas de ese lugar y no ofertaas en el salón. Dentro de la paciencia normal q hay q tener en estos lugares, denotamos un tiempo excesivo en solicitarnos la primera bebida, en la posterior reposición de pan, q normalmente es ofrecida pero q nosotros tuvimos q solicitar en varias ocasiones. En la segunda ronda de bebida, de las 2 q pedimos, se olvidaron la segunda, tuviendo a hacer hincapié en recordarlo. La comida, exquisita, tanto las tapas previas como la ensaladilla y el lobito en adobo. Como plato principal pedimos el arroz negro y estaba algo salado. El calamar perfectamente al punto. De postres, el arroz a la vainilla no estuvo a la altura en comparación con el Flan de huevo, q fue una exquisitez. Habiendo estado en Leña, Bibo Tarifa y Lobito, queda en 3er lugar por lo anteriormente expuesto.

Cuando vas a uno de los restaurantes de renombre no sueles equivocarte. El trato de los camareros fue exquisito, recomendando tanto cantidad como platos. Nos encantó las ostras, la tortilla de bacalao, el atún en cualquieras de sus opciones. Los postres tremendos, arroz con leche y tarta de queso. La recomendaciones de los vinos muy acertada

Un #Lobiteo en las mesas altas, un finde muy lluvioso en Marbella, en nuestro cercano Lobito de Mar, con nuestras siempre solicitadas (y solícitas) gambas cocidas, más el guacamole 🥑 que es tradicional, y el Tarantelo de atún que siempre pedimos… plan perfecto para una noche desapacible y lluviosa